La crisis desatada por el coronavirus que altera la vida humana, obliga a reperfilar urgencias económicas y trastoca la agenda de los gobiernos también se mete en la Legislatura bonaerense, que en plan prevención del contagio reduce al mínimo su funcionamiento, otorga licencias a sus empleados, aplica el home office y establece guardias mínimas. Al tiempo, la nueva dinámica borra grietas políticas y muestra a oficialistas y opositores en sintonía ante el avance del enemigo invisible del COVID-19
En el Senado se elevó un proyecto de beneplácito que respalda las decisiones de los gobiernos nacional y bonaerense para prevenir la expansión del virus. El proyecto tiene la firma del Frente de Todos y de Juntos por el Cambio. En ambas cámaras, se definió adherir a las medidas tomadas por la Nación y la Provincia y se dispusieron diferentes medidas para evitar el tránsito de personas en las dependencias tales como licencias y la disposición de realizar trabajo desde la casa. Además se reduce el horario de funcionamiento. Sin sesiones en el horizonte, también se analizan acciones para cuando las cámaras sesionen.
En Diputados, la cámara presidida por Federico Otermín, se definió la licencia en carácter preventivo hasta el día 31 de marzo para los trabajadores y las trabajadoras consideradas pacientes de riesgo. Quienes se encuentren a cargo de menores de edad que concurran a guarderías, jardines maternales, establecimientos educativos de nivel primario y secundario tendrán justificada su inasistencia.
En el Senado, la vicegobernadora Verónica Magario también licenció a quienes tengan sesenta o más años de edad -o quienes cumplan esa edad durnate la vigencia de la medida-, a mujeres embarazadas, personas con depresión inmunológica de cualquier origen, personas que padezcan diabetes, insuficiencia renal, hipertensión acompañada de patologías cardiológicas, a quienes hayan sido sometidos a trasplantadas o sufran patologías oncológicas y a personas con antecedentes de patología respiratoria crónica o cursando infecciones respiratorias.
Por el momento no hay sesiones programadas. En ambas cámaras reconocen que es todo “día a día”. Y no descartan extremar medidas de prevención en caso de que avance la pandemia. En tanto que se reducirá al mínimo posible el número de personas para todo encuentro que deba llevarse a cabo. Los legisladores dejaron guardias mínimas en sus oficinas. Por caso, el bloque opositor en el Senado tiene a todos sus asesores trabajando desde sus hogares.
La crisis borró diferencias políticas. Los bloques del Frente de Todos y de Juntos por el Cambio en la Cámara alta firmaron un proyecto conjunto donde muestran su beneplácito por las medidas adoptadas y el modo en que los gobiernos de la Nación, de la Provincia de Buenos Aires y las que limitan con ella han coordinado acciones para hacer frente a la pandemia. Y destacan la importancia del decreto 132 que declara la Emergencia Sanitaria en el territorio bonaerense.
“Como representantes del pueblo bonaerense, llamamos a seguir las recomendaciones y a colaborar para cuidarnos entre todos en el marco de esta situación compleja”, remarcó el jefe de bloque del FdT en la Cámara alta, Gervasio Bozzano. Su par de Juntos por el Cambio, Roberto Costa, explicó que “es importante (…) acompañar el trabajo que el gobierno viene realizando. Todos tenemos el compromiso de aportar para el bienestar de cada vecino, de seguir las recomendaciones de los expertos y de colaborar con la difusión de las medidas que se brindan por canales oficiales”.