El Ejecutivo bonaerense optó por no pronunciarse de manera oficial sobre los conflictos desatados en los municipios de Olavarría y Junín luego de los incidentes acontecidos (de manera más intensa en el distrito del centro geográfico de la provincia) que incluyeron un acampe dentro del palacio municipal en Olavarría y un hecho similar en la comuna gobernada por Pablo Petrecca.
Losincidentes activaron una avanzada de intendentes y legisladores de Juntos por el Cambio, que le pidieron a Kicillof que interviniera. En La Plata, toman distancia, se refugian en el hermetismo y reducen la crisis a asuntos más bien distritales.
Como contó Letra P, el primer episodio se registró en la comuna conducida por Gallo. Este martes, durante más de cinco horas, vecinos y miembros de la Mesa de Emergencia que acampan frente al palacio municipal desde hace 21 días tomaron el edificio en reclamo de soluciones habitacionales para un grupo de familias, mientras que, en la mañana de este miércoles, una situación similar se registró en el distrito de otro intendente PRO: Junín. En el municipio gobernado por Petrecca, trabajadores de una cooperativa ingresaron al edificio reclamando mejoras laborales.
Tras la intervención de fuerzas de seguridad y algunas reuniones de funcionarios municipales, los reclamos fueron encauzándose, pero pusieron en agenda el pedido de Juntos por el Cambios para que la Provincia interviniera, ya que en el caso de Olavarría, por ejemplo, el núcleo de uno de los reclamos son mejoras habitacionales. Sin embargo, Kicillof no atendió el pedido público de la oposición.
Distintas fuentes del Ejecutivo consultadas por Letra P optaron por tomar distancia de los hechos. El plan, sugieren, es mantener el silencio y dejar que los intendentes encaren las resoluciones.
El jefe comunal de Vicente López, Jorge Macri, sostuvo que "los problemas habitacionales y de vivienda son responsabilidad de los gobiernos provincial y nacional. No del intendente. Seria bueno que Grabois y su gente su gente les reclamaran a ellos". Lo mismo hicieron el intendente Julio Garro (La Plata) y Martín Yeza (Pinamar). El líder del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), Juan Grabois, desmintió que su organización esté detrás del campamento en la puerta del Palacio San Martín en Olavarría.
El bloque de senadores opositores también se solidarizó con el intendente de Junín. “No se trata de hechos azarosos, hay una utilización sistemática con fines partidarios de la necesidad de los vecinos y trabajadores en municipios gobernados por nuestro espacio político”, expresaron los legisladores y agregaron: “Una vez más nos pronunciamos en contra de la violencia y la provocación como modo de extorsión. Son prácticas que no condicen con la vida democrática”.
Además, hicieron “un llamado al diálogo” y esperan que “el gobernador tome cartas en el asunto para salvaguardar la institucionalidad. Estos hechos nos hacen rememorar una etapa oscura de nuestra historia a la que los argentinos le dijimos hace tiempo nunca más”. Por el momento, el mandatario y su equipo no se han pronunciado públicamente. Si los conflictos continúan, podrían intervenir en las próximas horas, cuando, por la agenda de la pandemia, mantengan una reunión virtual con jefes comunales del interior bonaerense.