Después de que el Banco Central (BCRA) emitiera una resolución para limitar operaciones de compra de divisas y de títulos para armar “rulos” financieros destinados a eludir las restricciones del cepo y generar ganancias de hasta el 7% en un día, la Comisión Nacional de Valores (CNV) complementó este jueves la ofensiva, trabando de hecho ese atajo.
La CNV estableció, en concreto, que la operatoria -que consiste en la adquisición de dólares dentro del cupo de diez mil establecido dentro del cepo, el uso de ese dinero para la compra de títulos en la moneda estadounidense y su venta en pesos, para reiniciar la rueda- ya no pueda realizarse en una sola jornada sino que se estire a doce días, incrementando drásticamente el riesgo precio que permite el arbitraje de cotizaciones y, con ello, la generación de las ganancias.
Eso se suma a lo dispuesto por el Central a través de la circular A 6780, que impone a las personas humanas que compren dólares mantenerlos cinco días hábiles antes de comprar bonos o acciones.
Todo lo anterior rige para las operaciones menores a los diez mil dólares, esto es el cupo máximo mensual para que los individuos adquieran dólares en el marco del control de cambio dispuesto el pasado 1 de septiembre.
Hasta el momento, esas operaciones se realizaban una y otra vez al contado durante una rueda, mientras el individuo en cuestión no sobrepasara el cupo mensual de compra de 10.000 dólares establecido en el cepo. Ese “rulo” permitía generar ganancias de hasta un 7% en pesos y, en tanto la cotización del dólar se mantenía quieta, también en esa moneda.
De esta manera se limita drásticamente la operatoria llamada “dólar MEP” (Mercado Electrónico de Pagos) o “dólar bolsa”, rueda financiera que mantiene en todo el momento el dinero dentro del país. ¿Por qué, entonces, se apuntó en primer lugar a esa modalidad?
Básicamente porque implica compras reiteradas de dólares dentro del cupo, dinero que sale de las reservas y contribuye a su erosión.
De hecho, para mantener quieto al dólar, el Banco Central debió intervenir este jueves en el mercado a través de ventas directas.
En tanto, no se modifica por el momento la operatoria conocida como “contado con liquidación” (CCL), que implica la compra inicial en pesos de un una acción o título que cotiza también en Wall Street y su reventa en dólares en el exterior, donde queda depositada la ganancia.
En el mercado se preguntan, sin embargo, si esta liberalidad se mantendrá, en la medida en que la presión compradora dispara la cotización del dólar CCL, influye en el valor del blue y, por vía indirecta, en la inflación.
Este último es el atajo de las empresas para dolarizarse, dado que el cepo les impide directamente el acceso a las divisas en el mercado local. Sin embargo, el CCL no compromete las reservas del Central, por lo que no resulta perjudicial para su mantenimiento, considerado crítico dado el nivel de compromisos de deuda del último tramo del año y del comienzo del próximo.