Lanzada de lleno en la estrategia del Gobierno de excavar en la grieta, la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal volvió a tener como eje de su discurso los dardos hacia el kirchnerismo. En una entrevista concedida a Canal 13, la mandataria provincial aseguró sobre un eventual gobierno de su principal contrincante: "La Cámpora va a ser el gobierno. No va a influir, va a gobernar. (Axel) Kicillof es Máximo (Kirchner) y el proyecto es Máximo 2023. Por eso hicieron este armado".
En esa línea, remarcó que el ex ministro de Economía y candidato a la Gobernación por el Frente de Todos "representa al sistema que gobernó la provincia 28 años y no dio respuestas a cosas muy básicas". En tanto, también dirigió dardos a la figura de Sergio Massa: "He tenido un vínculo de consenso con él para sacar leyes, pero es inentendible que vuelvas a un lugar del que te fuiste por diferencias profundas, de valores. Va a costar que la gente vuelva a creer en él. Nadie se va con los votos en una valija".
Sin dejar de enfocarse en la oposición, Vidal disparó: "El kirchnerismo ha logrado construir explicaciones para lo inexplicable y hacer de la verdad algo menor. Hay cosas que no están sujetas a la interpretación. No podés decir que no podés medir la pobreza porque estigmatiza. La justicia militante no está bien. Tratan de envolver con buenos discursos y muchas mentiras realidades que son inocultables".
Al recurrir a la óptica “multidimensional” de la pobreza que utiliza el macrismo para contrarrestar la marcada pérdida del poder adquisitivo, aumento de tarifas y crecimiento de la desocupación, la mandataria bonaerense esgrimió: “Si a los bonaerenses les preguntás si están mejor porque se dejaron de inundar o no tenían agua potable y pagaban una tarifa de luz más cara o al que pagaba un servicio de emergencia privado, discutamos. Discutamos también, reconociendo el esfuerzo de la gente, si hay un cambio más profundo que tiene que ver con la dignidad y los valores".
Así, recurrió al habitual ejemplo PRO: “Una vecina me dijo que los días que llovía 'no podía salir de la casilla y ahora mis hijos pueden correr'" y que otra mujer le confesó que como ya no tenía calle de tierra "me voy a poder comprar zapatillas blancas".
Al volver a Kicillof, sostuvo que "no se trata de él. Él y todos los que forman parte de esa lista (del Frente de Todos) representan al sistema que gobernó a la provincia 28 años, contra el que me enfrenté en 2015". Y ahondó: “No se trata de una cara sino del sistema que en 28 años no dio respuestas a cosas muy básicas: no dio chalecos a los policías, no dio respuesta a los pacientes con cáncer e hizo que en las cárceles no hubiera candados. No hacían las rutas y había escuelas destruidas. Las caras cambian, pero en el fondo es lo mismo".