Desde el último sábado, varios puntos de la capital bonaerense permanecen a oscuras. Un fuerte apagón afectó fundamentalmente los barrios City Bell, Gonnet, Villa Elisa, Hernández, Arturo Seguí, Gorina y otras zonas de La Plata, afectando a miles de usuarios y comercios que ya registran significativas pérdidas por estas horas. En ese contexto, el gobierno de María Eugenia Vidal está en la mira en un contexto de significativos aumentos tarifarios habilitados durante su gestión que no se traducen en el control y seguimiento del plan de obras que tendrían que llevarse a cabo desde las empresas distribuidoras de energía.
Sin embargo, durante la actividad que este lunes encabezó junto al presidente Mauricio Macri en San Andrés de Giles, Vidal omitió el tema, mientras que los funcionarios de su administración también se llamaron a silencio. El único funcionario de Cambiemos que se refirió al tema fue el intendente de La Plata, Julio Garro, quien habló de "multas", "resarcimiento" y de "ir hasta las últimas consecuencias" en una serie de mensajes que publicó en su cuenta oficial de Twitter.
El agudo silencio de la administración vidalista va en sintonía con su proceder ante los constantes apagones que suelen afectar a la capital de Buenos Aires y que han llegado a puntos límite, como el hecho sucedido este año en el principal centro de salud de la provincia de Buenos Aires: el Hospital General San Martín, donde se registró en enero pasado un apagón de más de tres horas, sin que funcionen incluso los generadores, por lo que en áreas sensibles como la terapia de neonatología los médicos tuvieron que asistir a muchos bebés en forma manual y con las linternas de sus celulares.
En esta oportunidad, la falla que provocó el apagón se produjo en la subestación eléctrica de City Bell. Según Edelap, la empresa que brinda el suministro, son unos 18 mil usuarios los que continúan sin luz. Un verdadero caos, que se traduce en otra suma similar de habitantes sin agua, semáforos que no funcionan y el temor por la inseguridad. La empresa comunicó que las tareas de reparación van a llevar al menos tres días.
Esta situación forma parte también de un escenario crítico en materia de abastecimiento de energía en la provincia de Buenos Aires, donde se viene alertando desde el arco opositor una significativa sub ejecución en infraestructura, también en materia de energía.