La novela sobre la titularidad de la CTA Autónoma, una escisión de la central que conduce Hugo Yasky, pareciera haber llegado a su fin después de varios años de enfrentamiento entre sus principales dirigentes. Una resolución administrativa de la Secretaría de Trabajo, a cargo de Lucas Fernández Aparicio, homologó a las autoridades reconocidas judicialmente, por lo que el dirigente de los visitadores médicos Ricardo Peidró, un hombre del secretario general de ATE Hugo "Cachorro" Godoy, será formalmente el titular de esa organización.
"Este hecho, nos reconoce como la única conducción legal de las organizaciones y trabajadores y trabajadoras afiliados a la CTA-A en todo el territorio argentino", dice el comunicado oficial, en el que se informó sobre la definición de la cartera de Trabajo y lo analizan como "el resultado de las iniciativas políticas y acciones que realizamos durante estos meses".
"Se abre ahora una nueva etapa, que nos encontrará como siempre, con iniciativas, en la calle y luchando contra el ajuste y el saqueo que propone este gobierno”, celebró Peidró.
La decisión es un golpe directo a Pablo Micheli, quien desde hace un par de años mantiene un enfrentamiento interno con el sector de Godoy, que se agudizó el año pasado cuando los trabajadores de esa central debían renovar autoridades. Las diferencias políticas entre ambos dirigentes estallaron cuando, al calor del gobierno de Cambiemos, Micheli propició una estrategia de acercamiento con la CTA de Yasky y con la CGT, archienemigos del sector que orienta el dirigente estatal.
"El Gobierno me sacó de la conducción de la CTA Autónoma premeditadamente. Y los que lo aceptaron son cómplices", sostuvo Micheli este jueves en declaraciones radiales, en las que blanqueó que van "a hacer una impugnación inmediata y vamos a denunciar esto en la OIT. Es una violación flagrante a la democracia y la libertad sindical".
Lo cierto es que la fractura entre ambos sectores quedó expuesta en enero de 2017, cuando los opositores a la conducción de Micheli inauguraron una nueva sede en el barrio de Almagro, en la calle Juan Domingo Perón, que dio inicio a la etapa en la que convivieron tres centrales del mismo nombre. En septiembre del año pasado, Micheli fue expulsado de ATE a través de una carta documento y perdió su sueldo en la organización y sus fueros gremiales.
El siguiente episodio de la pelea fueron las convocatorias paralelas para renovar autoridades de la CTA-A en junio y agosto del año pasado, que fueron impugnadas por ambos sectores. Finalmente, los fallos judiciales recientes reconocieron las elecciones del sector de Godoy y proclamaron a Peidró como secretario general de la central.