Las ventas de autos usados alcanzaron en marzo las 125.853 unidades, lo que representó una caída del 16,47% comparado con igual mes de 2018, cuando se comercializaron 150.670. Así lo informó el presidente de la Cámara del Comercio Automotor, Alberto Príncipe.
"Nuestro negocio está supliendo este `bache´ con el mercado particular, es decir, con el público que por falta de recursos se le hace insostenible el mantenimiento de su automóvil por los gastos e impuestos que requieren mensualmente, dejan los vehículos en nuestras empresas para su venta", señaló el dirigente sectorial. A la vez, consideró que "esto no es un paliativo, es un equilibrio momentáneo".
Si las ventas de marzo se comparan con febrero (133.805 unidades), hubo una baja del 5,94%.
En los primeros tres meses del año (408.274 unidades), la baja llega al 8,45% comparada con el mismo período de 2018 (445.946 unidades).
Príncipe también se quejó de que "ante un mercado con porcentajes de venta permanentemente en baja, debido a la dura crisis que vive la industria automotriz, la enorme caída de la comercialización del auto 0km está afectando directamente al sector del auto usado, haciendo que el comerciante pierda el lugar más importante de abastecimiento".
El directivo sostuvo que "queda la esperanza de la reconversión del mercado de autos nuevos, de acá hasta fin de año, con la colocación de los stock, tanto de concesionarias como terminales".
Otra estrategia que están utilizando las concesionarias, según Príncipe, es "aumentar sus volúmenes de venta con bonificaciones, acordes a la situación reinante".
"Esto mejoraría la posibilidad del aprovisionamiento de la mercadería faltante para nuestros negocios", explicó.
Por otra parte, el presidente de la Cámara del Comercio Automotor explicó que "el reordenamiento de las estructuras de estos comercios es de más fácil reducción, aunque no se pueda disminuir la voracidad fiscal, tanto municipal, como provincial y nacional".