A tono con la emergencia económica que avanzó a nivel nacional y provincial, varios intendentes bonaerenses anunciaron que avanzarán con medidas para hacer frente a la crisis económica. Entre las herramientas adoptadas, indicaron que no aumentarán sus sueldos durante el primer semestre de 2020.
El jefe comunal de Coronel Suárez, Ricardo Móccero, anunció que ese municipio bonaerense es "inviable" porque se encuentra "sin fondos", por lo que congelará desde enero los sueldos de los funcionarios políticos dado que "el sacrificio lo vamos a tener que hacer todos". En un comunicado, el jefe comunal vecinalista que acaba de asumir en reemplazo de Roberto Palacio, de Juntos por el Cambio, afirmó que la crisis responde sobre todo a una deuda con el hospital público y un déficit millonario como consecuencia del presupuesto municipal anteriormente aprobado.
Por ello, anunció que "ningún aumento que reciban los empleados municipales recaerá sobre el sueldo de los funcionarios" porque "a partir de enero, quedan congelados". "No podemos permitir que haya gente que pase hambre en nuestro distrito", evaluó el intendente y adelantó que venderá el auto oficial de la comuna, que utilizará su vehículo particular, y que se desprenderá de otros bienes municipales como terrenos "y una combi con equipamiento de alta tecnología que compró la gestión anterior en una cifra millonaria". Además, indicó que "se eliminarán la totalidad de horas extras pagadas al personal municipal y en forma gradual las bonificaciones".
En la misma línea se expresó Guillermo Britos de Chivilcoy. El jefe comunal de Consenso Federal anunció que decidió congelar su propio sueldo y el de toda la planta política hasta el 30 de junio próximo, y sostuvo que se trata de "dar el ejemplo desde arriba hacia abajo".
"Congelamos los sueldos de toda la planta política, empezando por mi salario y el de todos los secretarios, directores y coordinadores que ocupan puestos políticos y no son empleados de carrera", explicó y agregó: "Si todos los que tienen menores ingresos están en emergencia, claramente nosotros tenemos que dar el ejemplo", aseveró Britos en declaraciones formuladas esta mañana a la radio La Red.
Por su parte, el intendente de Las Flores, Alberto Gelené, renunció a la percepción de su sueldo como jefe comunal y seguirá percibiendo la jubilación de la que ya es beneficiario por su extensa carrera en la administración pública.
“Pedí al Tribunal de Cuentas que me eximan de cobrar el sueldo directamente, y seguir con mi jubilación y tengo mi estudio que algún ingreso más por mi profesión (ingeniero hidráulico) tengo”, sostuvo Gelené y agregó: "Como el sueldo del intendente representa un cargo importante para el municipio y las arcas municipales no están bien, le pedí al Tribunal de Cuentas que me eximan de cobrar el sueldo directamente", aseveró el jefe comunal, quien indicó que su haber como intendente rondaría los 170 mil pesos.
En la entrevista, Gelené sostuvo que, en su distrito, conducido en los últimos cuatro años por Ramón Canosa de Juntos por el Cambio, "se perdieron entre 1.500 y 2.000 puestos de trabajo". "Tenemos muchas fábricas de calzado e indumentarias de las principales marcas; eso impactó mucho en el desempleo y la precarización laboral", remarcó el intendente de Las Flores, quien expresó la necesidad de "ordenar las variables para que, dentro un tiempo razonable de seis meses, puedan impactar en ordenar el déficit fiscal y motorizar nuevamente la economía, que es lo que más se necesita".