Después de más de dos décadas y media al frente de la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (APTA), Ricardo Cirielli afronta este jueves una elección crucial en la que definirá su continuidad. Un armado de agrupaciones opositoras al líder sindical, intentará, con chances ciertas, de desbancarlo en unos comicios que levantaron la temperatura en las horas previas.
El Frente La Voz de APTA, el armado opositor integrado por sectores del peronismo, el kirchnerismo y la izquierda, lanzó una batería de denuncias por presuntas maniobras por parte de la actual conducción que durante el gobierno de los Kirchner trazó una alianza, primero, con Luis Barrionuevo, y después se apoyó en Hugo Moyano, cuando el camionero se enfrentó a Cristina Fernández.
En la oposición apuntan contra la conducción de APTA por la apertura de mesas no habilitadas, el uso de urnas volantes y un supuesto engrose de padrones con afiliados ajenos al gremio.
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“Hacemos responsable a Cirielli y la Comisión Directiva por la seguridad del acto eleccionario, ya que constatamos que hay ingresos de no afiliados en los lugares de votación, como grupos de choque. Nuestro equipo jurídico está trabajando para prevenir cualquier maniobra de fraude”, señaló Alberto Salas, quien encabeza la Lista Celeste que quiere desbancar al dirigente que lleva 27 años al frente del gremio.
No obstante, las elecciones, en las que están convocados a participar algo más de 3.500 trabajadores, cuentan con el aval oficial de la Secretaría de Trabajo.
En la lista opositora creen que tienen chances ciertas de desplazar a Cirielli ya que, por primera vez, todos los sectores no alineados a la conducción se unificaron en una sola lista. En las elecciones internas de hace cuatro años, la oposición se presentó partida en tres listas distintas, lo que le permitió al oficialismo renovar su mandato, pese a haber obtenido menos votos que todos los disidentes sumados.
En esa oportunidad, la conducción actual consiguió mil votos, 300 menos que el conjunto de listas opositoras. Los dirigentes de la Lista Celeste están confiados ahora de mejorar esos números, al calor de la agudización de la crisis del sector aeronáutico.
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Hace cuatro años, el jefe de APTA contó con el respaldo del moyanismo, pero la relación entre esos sectores se debilitó durante el gobierno de Cambiemos por dos temas que se retroalimentaron: la llegada de Moyano a Independiente y la relación con el Ejecutivo.
Pese a los guiños iniciales del sector del camionero al candidato de Cambiemos, una vez llegado Mauricio Macri a la Casa Rosada la relación pegó un giro de 180 grados y se abrió un enfrentamiento con el macrismo, un movimiento que no acompañó Cirielli y resquebrajó la relación en el ámbito del club de Avellaneda, aunque el aeronáutico mantiene todavía su cargo en la Comisión Directiva.
Por eso, cerca del secretario general de APTA creen que el camionero respalda a sus adversarios internos, los que intentarán desplazarlo.