La Bolsa de Buenos Aires se desplomó 8,8% este miércoles y su índice principal, el Merval, cerró a 25.960, en lo que el mercado lee la disipación del efecto positivo de la declaración del país como “mercado emergente” por parte de MSCI.
Se trata de la cuarta corrección consecutiva,la mayor en pesos desde junio de 2014 y, medida en dólares, la más importante desde octubre de 2008.
En tanto, influido por el clima externo, el dólar subió 30 centavos hasta $27,90 en el Banco Nación.
Más importante, la divisa estadounidense terminó a $27,44 en el tramo mayorista, el que mueve al mercado, esto es con un alza del 1,25%.
El avance de la divisa estadounidense en el segmento mayorista se atenuó después de la licitación de 100 millones a $27,27 que realizó el Banco Central por cuenta del Ministerio de Hacienda. La operatoria, con dinero girado por el Fondo Monetario Internacional, contempla la venta de ese monto durante 75 días hábiles.
En tanto, en el mercado accionario, que perforó a la baja la barrera de los 26.000 puntos, los papeles de empresas energéticas y bancos fueron los que más sufrieron más la jornada, con derrumbes de hasta el 16%.
También registraban un mal desempeño los papeles que cotizan en Wall Street, los ADR, los que supuestamente deberían favorecerse de modo directo con la decisión de MSCI.
La caída generalizada alcanzó también a los bonos de deuda soberana y el riesgo país trepó a 586 puntos, su mayor nivel desde octubre de 2015.
Según le dijo a Letra P el director de Portfolio Personal Pablo Castagna, "la noticia y posterior entusiasmo por el pase de mercado fronterizo a emergente duró 48 horas porque los inversores del exterior, que son los que mayores volúmenes operan en acciones argentinas vía los ADR, están castigando a todas las acciones de empresas de países emergentes. Sin embargo, ese castigo es mucho más marcado en el caso de las acciones de empresas argentinas".
"La razón de lo anterior -agregó- es que se espera que, además de conseguir estabilidad cambiaria en el país, se den indicios de que se avanza en bajar el déficit fiscal, en bajar la inflación y en bajar las tasas de interés. Eso ayudará a recuperar la confianza y a que los fondos del exterior, que van a estar habilitados a comprar acciones argentinas, efectivamente lo hagan".