La Confederación General del Trabajo (CGT) realiza este lunes su tercer paro general por 24 horas contra las políticas económicas del gobierno de Mauricio Macri, mientras que las organizaciones sociales y los partidos de izquierda harán cortes en diferentes puntos del país.
La huelga, sin movilización, recibió la adhesión de las dos Centrales de Trabajadores Argentinos (CTA), y de movimientos sociales.
Se adhirieron sindicatos claves como los estatales UPCN y ATE, además de los de todos los medios de transporte y la banca, lo que afectará tanto a la Administración Pública como al sector privado
Los partidos Obrero, Movimiento Socialista de los Trabajadores e Izquierda Socialista, todos de la izquierda trotskista, anunciaron que desde las 7 harán cortes del tránsito en accesos a la ciudad de Buenos Aires, donde al mediodía llevarán a cabo un acto en el Obelisco.
La CGT fundamentó esta huelga "en la necesidad de expresarle al Gobierno nacional" su "más enérgico repudio al ajuste salvaje al que somete a los trabajadores".
En este sentido, citó "el veto a la rebaja de tarifas aprobado por el Congreso y el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y sus consecuencias sobre el empleo, la obra pública, la seguridad social y las economías regionales, que no hacen más que agravar dramáticamente la ya insoportable situación social".
"No vamos a permitir que el ajuste lo hagan otra vez los que menos tienen, los trabajadores ocupados y desocupados, los jubilados y los sectores más vulnerables, que ya viven en condiciones sociales extremadamente precarias," remarcó en un documento difundido a mediados de junio.
Por su parte, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, consideró que la protesta "no tiene ningún sentido" porque "ni siquiera la gente sabe por qué está parando".
"En el gobierno no rompemos el diálogo", subrayó en declaraciones a distintos medios de prensa. Y agregó: "Al día siguiente vamos a estar en el mismo lugar. El diálogo está; hablamos con todos los que quieran sentarse a dialogar pero hay muchos que no quiere".
A su vez, la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, remarcó que "la huelga es un derecho", pero advirtió que "no transforma la realidad" del país.
"La huelga es un derecho de todos los trabajadores, pero creo que un paro no cambia, no transforma la realidad", aseguró Vidal, para quien "lo que transforma la realidad es trabajar juntos para cambiar aquello que nos preocupa".
El triunviro de la CGT Juan Carlos Schmid anticipó que esta huelga tendrá "un nivel de acatamiento muy grande, tal vez el más importante de los últimos años", debido "al agravamiento de la economía y todo lo que eso significa para el pueblo trabajador."
"Lo que debería ocurrir es que el Gobierno ponga un poco más de atención a todos estos problemas, porque hasta ahora su atención fue escuchar mucho más a los sectores concentrados de la economía," puntualizó Schmid.