El Grupo L, la corporación manejada por Víctor Lusardi y su familia que se hizo de múltiples licitaciones en los últimos años en la Ciudad, la Provincia y distritos del GBA administrados por el PRO, sigue expandiendo sus tentáculos en la administración vidalista. A cargo de la provisión de comida en cárceles y hospitales bonaerenses hasta 2019, ahora ganó la porción mayoritaria de la licitación para abastecer de víveres en cocido y en crudo con destino a los niños y jóvenes alojados en Hogares y Casas de Abrigo, con dos años de contrato por más de $235 millones, pudiéndose incrementar hasta un 20% el valor y con posibilidad de prórroga por otro año.
Con un proceso licitatorio que no estuvo exento de polémica, Cook Master SRL –del Grupo L- fue objetada por una de las empresas participantes de la compulsa que advirtió que la oferta realizada por la compañía de los Lusardi incumplía con uno de los puntos del pliego de condiciones particulares. Aquí, se hizo hincapié en el punto 9 de dicho pliego que expresa: “Se procederá a descartar aquellas ofertas cuyos precios cotizados se encuentren por debajo de los precios máximos estipulados, en más de 5%”. En efecto, en seis renglones de la oferta de Cook Master se excedía ese límite de cotización establecido.
Y, en la resolución publicada este viernes en el Boletín Oficial, la Provincia admite este exceso (de 0,01 centavo por ración) pero de todas formas no descartó la propuesta de Cook Master. El gobierno de Vidal amparó esta decisión “a fin de evitar incurrir en un exceso de rigorismo formal que restrinja la posibilidad de que la Administración cuente con la mayor cantidad de ofertas posibles”, por lo que consideró “razonable considerar a las propuestas cuestionadas como válidas y admisibles, dado que la diferencia de $0,01 centavo no es relevante significativamente como para excluirlas por dicho motivo”.
Así, la empresa del Grupo L no sólo fue admitida en la licitación, sino que ganó su mayor porción: diez de los doce renglones (zonas a abastecer) por un total de $235.911.450,10. Esto lo logró a pesar de llegar con el mismo puntaje que otras dos empresas.
PLAZO CUESTIONADO. La adjudicación vuelve a ser por 24 meses, plazo que ya había sido cuestionado el año pasado por el diputado bonaerense del Frente Renovador
Ramiro Gutiérrez en lo que refiere a la licitación para la provisión de alimentos en cárceles que también ganó Cook Master. El legislador massista presentó un pedido de informes donde remarcaba: “No surge en ninguna parte del decreto la fundamentación del porqué se toma como plazo de prestación de servicio 730 días, siendo que los plazos normales de las prestaciones de servicio se dan a año calendario siguiendo las pautas que establece el presupuesto de la provincia. Esto se representa en la elevada inflación que se refleja en los precios y sobre todo los que hacen a los alimentos”.
Cook Master abastecerá Hogares y Casas de Abrigo en La Plata y la zona metropolitana, mientras que la zona interior (minoritaria en cuanto a montos), quedó para Codyela S.A, la cual supo ganar licitaciones en la Ciudad en Unidad Transitoria de Empresas (UTE) con otra firma del Grupo L: Biocam Catering.
SIEMPRE ELEGIDA. En julio de 2017, Cook Master se hizo de la provisión de comida hasta 2019 en los hospitales bonaerenses Alberto Eurnekian de Ezeiza, Héroes de Malvinas de Merlo, Vicente López y Planes de General Rodríguez y Cecilia Grierson de Guernica por un monto total de $ 140.713.924. Meses más tarde, ganó el grueso de la licitación -por $1.030.621.592- para la prestación del “servicio asistido de racionamiento para la cocción de alimentos para distintas Unidades Carcelarias y Establecimientos Penitenciarios”.
Tal como detalló Letra P en su momento, la adjudicación en cuestión se hizo en el marco de un polémico proceso licitatorio que contó con objeciones de pymes que quedaron afuera y que, fundamentalmente, cuestionaron los requisitos de admisibilidad puestos por la Provincia para poder ser seleccionadas.
La porción adjudicada a Codyela asciende a $63.271.779,10. Esta empresa estuvo recientemente en el ojo de la tormenta en Bahía Blanca, cuando en el Hospital Penna de esa ciudad se detectó un caracol en una ración de este establecimiento donde Codyela tiene el servicio. Por esta razón, y según informó La Nueva, el Ministerio de Salud intimó a la empresa. Poco después de ese episodio, la Provincia le adjudica nuevos servicios.