El interbloque Argentina Federal, que conduce Miguel Ángel Pichetto, le dio tiempo al oficialismo hasta el martes a las 18 para presentar una propuesta “razonable” que implique “efectivamente una reducción de las tarifas para los ciudadanos” antes de avanzar con la sanción de la ley de Tarifas Justas, que aprobó la oposición unida en Diputados la semana pasada.
“Queremos fijar una posición de naturaleza política muy clara. Brindarle al Poder Ejecutivo una oportunidad, dado que a través de voceros importantes han anunciado que vetarían la media sanción que viene de Diputados”, dijo Pichetto en el plenario de las comisiones de Derechos y Garantías, Presupuesto, y Energía y Minería, que tuvo lugar en el salón Illia.
El presidente del interbloque Argentina Federal afirmó que “carece de toda lógica” pretender que los servicios públicos aumenten un 40 por ciento, mientras la pauta salarial que impulsa el Gobierno es del 15 por ciento. Además, rernarcó que el peronismo federal “siempre ha actuado con la máxima responsabilidad institucional y política, sin demagogia y mirando al interior”. Y procuró que el plenario de comisiones no se realizara el martes, porque “el país estaba a la espera de los acontecimientos financieros”, en referencia a la fecha de renovación de las Lebacs.
En ese contexto, Pichetto anunció que su bloque esperará una contra propuesta del Gobierno para el tema tarifas. “Caso contrario, vamos a ratificar esta media sanción que va a funcionar como un mensaje”, dijo. Y admitió, en referencia a las críticas que le dispensó la Casa Rosada al proyecto, que “muchas veces el Congreso no sanciona la mejor ley, pero a veces lo hace para enviar un mensaje al Poder Ejecutivo, para decirle que no está de acuerdo con la política”.
Mientras tanto, el oficialismo jugará su última carta para intentar frenar la ley apelando a la participación de los gobernadores, algunos de los cuales se manifestaron en contra del proyecto, como el cordobés Juan Schiaretti, pese a que los diputados del bloque Córdoba Federal, alineado con el mandatario, votaron a favor de la iniciativa cuando se trató en la Cámara baja.
"Necesitamos escuchar a los gobernadores de provincia, que presenten su postura sobre la cuestión de las tarifas, porque al aplicar una retroactividad se obliga a las distribuidoras provinciales a efectuarle una devolución a los usuarios", planteó el chaqueño Ángel Rozas. "¿Qué piensan los gobernadores de esto? Quiero que se los cite, porque acá hay una intromisión a las jurisdicciones provinciales. Quiero saber qué piensan los gobernadores", había pedido el presidente del interbloque Cambiemos, Luis Naidenoff.
En ese contexto, a propuesta del senador de Cambiemos Ernesto Martínez, el plenario de comisiones pasó a un cuarto intermedio hasta el martes. La moción, que fue aceptada por la mayoría de los senadores, provocó el enojo del kircherismo, que acusó al peronismo dialoguista de “dilatar el tema”. “Todo el oficialismo se paró, y acompañado del bloque de Pichetto, abandonaron la comisión. Han quedado demostradas las complicidades entre los diferentes bloques de senadores", dijo más tarde el presidente del bloque del Frente para la Victoria, Marcelo Fuentes, en diálogo con Radio 10.
Fuentes debía ser el próximo en tomar la palabra justo cuando la reunión terminó, de manera abrupta. Sin embargo, el plenario acordó que el martes 22, al retomarse el debate, se continuará con la lista de oradores. Ese día el oficialismo pretende contar con la presencia de los gobernadores –algo que fue puesto en duda por el bloque peronista– y con representantes de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa).
A las 18 de ese día vencerá el ultimátum anunciado por Pichetto y, si el Ejecutivo no envía una contrapropuesta, se firmará el dictamen y el Senado quedará en condiciones de tratar la ley en el recinto, lo que podría estirarse hasta la semana siguiente.