En medio de la crisis en el mercado cambiario y tras el pedido de auxilio financiero al FMI, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, llamó a todos los sectores a “un gran acuerdo nacional” para “acelerar el déficit fiscal”.
“El marco para un gran acuerdo nacional es el presupuesto 2019, donde todas la partes, nos tendremos que sentar con apertura, generosidad y responsabilidad, para no mentirle más a la gente, no podemos seguir pensando que la culpa es de otros”, afirmó el jefe de ministros tras la reunión de Gabinete que se realizó en la Casa de Gobierno.
En este sentido, pidió “no pensar en fantasmas" en referencia a las exigencias del organismo multilateral para asistir a la Argentina en medio de esta crisis financiera.
Sobre este punto, Peña dijo: "La decisión sobre el acuerdo que llegaremos con el Fondo, es enteramente de la Argentina. No existe como paso en otro momento una decisión de pedirle al Fondo Monetario una política económica".
El funcionario destacó que "el desafío es entender que no podemos seguir gastando más de lo que tenemos", por lo que consideró que "hay una vocación del presidente de dialogar con todos los sectores para plantear los desafíos que tenemos”.
Asimismo, precisó que "no podemos seguir pensando que la culpa es de otros", al sostener que "la culpa de que gastemos más de lo que tenemos es de los argentinos", y manifestó que "la responsabilidad para solucionar es nuestra".
En otro orden, valoró la "actitud responsable" que prima "en la inmensa mayoría" de los dirigentes sindicales, a quienes diferenció, aunque sin nombrarlos, de quienes marcharon en rechazo a los aumentos tarifarios.
"No vamos a especular sobre cuestiones que puede plantear una persona", respondió el jefe de ministros al ser consultado sobre la advertencia de una posible convocatoria a un paro nacional, lanzada por el dirigente cegetista Juan Carlos Schmid.
También, negó la intención del Gobierno de avanzar en una "reforma laboral" y, en cambio, dijo que lo que existen son iniciativas puntuales -un total de tres- que fueron remitidas por el Ejecutivo para su debate al Senado de la Nación.
"No hay una cuestión de reforma laboral; lo que hay son leyes puntuales que hacen al blanqueo laboral de los trabajadores informales, que hace a mejorar con la capacitación, la salud y las organizaciones", aseveró.