La decisión del presidente Mauricio Macri de prohibir la contratación de familiares de los ministros en la administración nacional tuvo su efecto en las primeras 24 horas ya que al menos seis funcionarios presentaron sus renuncias, aunque muchos aún se resisten a dejar sus cargos.
Las primeras en dejar su cargo fueron las hermanas del ministro Triaca. Mariana dejó la presidencia el Banco Nación, donde había asumido en diciembre de 2017 y Lorena dejó de ser la directora de Asuntos Externos de la Agencia Argentina de Inversiones. El mismo camino siguió su esposa, María Cecilia Loccisano, hasta ahora subsecretaria de Coordinación Administrativa del Ministerio de Salud.
Otros que dieron el ejemplo fueron Rodrigo de Loredo, yerno del ministro de Defensa, Oscar Aguad, que era el presidente de ARSAT; y Andrés Peña, hermano del jefe de Gabinete, Marcos Peña, que era Subsecretario de Desarrollo institucional productivo. Otro funcionario que renunció fue Matías Santos, hijo y -hasta este lunes- jefe de Gabinete de su padre, el ministro de Turismo.
Si bien los cuñados y yernos de los ministros también son alcanzados por la medida, Ernesto Reta (cuñado de Triaca) quiere seguir en el directorio del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) y, según trascendió, explica que no presentará su renuncia porque “es pareja sin papeles” de Mariana.
Quien tampoco se dio por aludida fue la prima de la vicepresidenta, María Alejandra Illia, quien es asesora del Honorable Senado de la Nación.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, también tiene parientes trabajando en la administración pública y ninguno de ellos, hasta ahora, dijo que dejará su cargo. Su hijo Francisco Langieri Bullrich es funcionario de la Secretaría País Digital, que depende del Ministerio de Modernización. Su primo Pedro Cernadas -popularmente conocido como Segundo Cernadas por su faceta actoral- es titular de Anses en el municipio de Tigre. La cuñada de la ministra, Ana Gascón Araoz, es empleada en la Subsecretaria de Comunicación social de la Secretaría de Medios de Comunicación.
La esposa del ministro de Interior, Victoria Costoya, es Coordinadora de Asuntos Institucionales Internacionales en el Ministerio de Desarrollo Social, y hasta ahora no dio señales de querer dejar su cargo.
La ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, tiene trabajando en su gabinete a su prima Cecilia, quien aún no dio indicios de sumarse a la lista de los funcionarios que siguieron el pedido de Presidente.
Otro que desoyó el pedido de “austeridad” del Presidente fue el ministro de Cultura, Pablo Avelluto, quien designó a su novia Carolina Azzi como coordinadora audiovisual de prensa de la cartera que encabeza.
En la misma situación se encuentra Rosario Cabrera, hija del ministro de Producción, que se desempeña como asesora de la cartera que conduce su padre.