(Corresponsalía).- Con la impronta del accionar delineado por la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, quien convocó a sus pares de Chubut, Neuquén y Río Negro para articular acciones en conjunto que posibiliten controlar al denominado grupo de Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), fiscales de esas provincias se reunieron con el objetivo de idear un protocolo que avance en el intercambio de información y así desarrollar una “política de persecución penal unificada”.
Los procuradores José Gerez (Neuquén), Jorge Crespo (Río Negro) y Jorge Luis Miquelarena (Chubut) se encontraron en la región de la Confluencia neuquina y firmaron un convenio de cooperación para darle mayor respaldo al proyecto que instaló la Casa Rosada en contra de la RAM. El mismo será una base de datos en conjunto que se compartirá. “Vamos a tener una estrategia común de carácter regional”, explicó Gerez. “La tendremos porque es la primera vez que tres ministerios públicos se reúnen para combatir un fenómeno criminológico que va en aumento”, insistió.
Como informó Letra P, el Gobierno nacional tomó especial atención -y quedó bajo la lupa- ante los hechos que terminaron en la desaparición, y posterior aparición sin vida, de Santiago Maldonado o el asesinato del joven barilochense Rafael Nahuel. En el último caso, Bullrich, en coincidencia con el gobernador Alberto Weretilneck, culpó a la influencia del RAM sobre las comunidades de la región andina.
“La intención es el intercambio de información para poder esclarecer hechos”, admitió Crespo. Miquelarena, en cambio, contó el enojo de varios representantes de las comunidades en Chubut. “Estos grupos no reconocen límites políticos”, volvió a plantear Gerez.
En el día que se cumple un nuevo aniversario del asesinato de Rafael Nahuel, se intensifica la actividad de los poderes de Estado para mostrarse unificiado y con capacidad de "frenar" a lo que se buscó instalar como un peligro para la Patagonia. “Este grupo desconoce el Estado Argentino, su organización, sus leyes, e instituciones tratando de imponer sus ideas de no pertenencia a la Nación Argentina por la fuerza y el temor. Su líder, Facundo Jones Huala, se encuentra detenido en la unidad Penitenciaria 14 de Esquel, pesa sobre él un pedido de extradición de Chile por incendios, tenencia de armas y municiones”, comentaba Bullrich a finales del 2017, cuando lanzaba el comando en conjunto para frenar al RAM.
Como detalla el informe que leyó Bullrich aquella jornada, el RAM depende del Movimiento Autónomo del Puel Mapu (MAP), es un “movimiento etnonacionalista violento” que desde hace “ocho años opera” en territorio argentino. Su accionar -resalta el texto- se concentra en las provincias de Neuquén, Río Negro y Chubut. Para el Ministerio que conduce Bullrich, “los activistas de la RAM cometen delitos contra la propiedad, contra la seguridad pública, contra el orden público y contra las personas”.
“Los distintos delitos que comete la RAM responden a un mismo objetivo político, que es promover una lucha insurreccional contra el Estado argentino y la propiedad privada de la tierra. La RAM considera que el estado argentino y sus leyes son ilegítimos”, advertía la funcionaria más respaldada por el presidente Mauricio Macri.
