Cristina Fernández de Kirchner sigue con sus recorridas por el conurbano bonaerense de cara a las PASO del 13 de agosto enmarcadas en encuentros con los “afectados” por las políticas del gobierno de Mauricio Macri: este martes visitó una Pyme en el municipio de Moreno para reclamar “amor por la industria nacional” y verter críticas indirectas contra Cambiemos.
La primera candidata a senadora por la provincia de Buenos Aires por el frente Unidad Ciudadana dialogó con trabajadores y con el dueño de una Pyme textil junto al intendente local, Walter Festa, y la candidata a diputada nacional Romina Uhrig.
“Hay que darle un trato especial a las Pymes, pero sobre todo hay que tener amor por la industria nacional”, sostuvo Cristina, tras escuchar críticas por la apertura de importaciones al dueño de la textil, que reconoció que “solo tenemos resto hasta diciembre”.
“Hay que ponerle límites. Las elecciones sirven para que la gente le dé un mensaje al gobierno. Hay que marcar que el camino que tomaron es incorrecto y que el conductor está equivocado”, afirmó CFK.
En seguida, la ex presidente brindó una extraña explicación sobre la situación actual del país, tras los 12 años de gobierno kirchnerista. Según la mandataria, la comparación entre la administración K y de Cambiemos se puede dar en el marco de una metáfora vial, con una autopista como ejemplo.
“Yo siento que íbamos por una Autopista. Todos íbamos por el mismo camino. Como en toda autopista había autos más modernos, otros más antiguos, algunos embotellamientos, pero íbamos todos por la misma autopista. Ahora salieron de esa autopista y entraron a una ruta de una mano, un camino equivocado en el que ya hay ripio. El conductor tiene que advertir las señales que las cosas van mal”, analizó CFK.
Para la ex mandataria, un ejemplo de su explicación “es la pyme que hoy visitamos y el mito de la competitividad”. “Ellos ganaron una licitación para vender bolsas a Carrefour a una empresa de Vietnam”, advirtió.
“La productividad no se logra con flexibilización laboral. Se logra si hay consumo interno para que los trabajadores de esta Pyme, y de todas las demás, puedan ir a comprar y llenar muchas de las bolsas que ellos producen, así la empresa puede seguir vendiendo”, finalizó Cristina.
En tanto, Festa sostuvo que “Moreno es un municipio que sufre de la política de ajuste del gobierno nacional”. “La realidad de esta empresa y sus trabajadores se repite en cada lugar de Buenos Aires y la Argentina”, afirmó el jefe comunal.
Scalter es una Pyme dedicada a la producción de telas tejidas y no tejidas, fundada en el año 1950 en Paso del Rey, partido de Moreno, actualmente golpeada por la caída del consumo, la pérdida de su principal mercado externo (Brasil), la apertura de las importaciones y el aumento de los costos.
Con la crisis de 2001 la empresa se había quedado con 12 empleados y una producción de 20 toneladas. A partir de 2003 comenzó una recuperación con la que llegó a producir 50 toneladas 2007, compra de maquinaria nueva incluida, y alcanzando en 2015 unas 400 toneladas con un total de 100 empleados.
“Este año, la producción se disminuyó un 20 por ciento y la empresa pasó de pagar 300 mil pesos a un millón cien mil de electricidad”, explicaron voceros de Unidad Ciudadana.