El gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, cerró la paritaria con los gremios estatales para 2018 con un aumento del 11% -13 puntos y medio por debajo de la inflación anual de 2017- más una cláusula gatillo por inflación.
Córdoba se convirtió, así, en la primera provincia en cerrar el acuerdo salarial con los estatales para el próximo año, en lo que es un nuevo guiño de Schiartti en su alianza política con el presidente Mauricio Macri.
El 11% también será la oferta que le hará la administración de la bonaerense María Eugenia Vidal a unos 600 mil empleados públicos, docentes, médicos, integrantes del Poder Judicial y policías, también con cláusula gatillo por inflación.
Los equipos técnicos de Schiaretti y Vidal proyectaron los aumentos sobre la base de las metas de inflación del Banco Central para 2018, que se ubican en el 10%, con un margen de oscilación de dos puntos para abajo y dos puntos para arriba.
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Esas metas, como las proyecciones de Córdoba y Buenos Aires, están lejos de las expectativas de suba del costo de vida del sector empresario consultado por la autoridad monetaria a través del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM).
El propio ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, había asegurado a mediados de este mes que las negociaciones paritarias de 2018 deberían cerrar en el 16,6% porque ésa es la expectativa de inflación de las empresas para el próximo año.
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A pesar de ello, el Ministerio de Hacienda proyectó una inflación del 15,7% promedio en el Presupuesto 2018 que este miércoles será convertido en ley por Cambiemos y el bloque Argentina Federal, que conduce Miguel Ángel Pichetto con apoyo de los gobernadores, entre los que se destaca Schiaretti.
Además, la posibilidad de que se cumplan las metas oficiales de inflación en 2018 son relativizadas por la experiencia de 2017, que está cerrando con un alza de precios del 24,5%, es decir, siete puntos y medio por encima de la pauta incluida en el cálculo de este ejercicio.