El acento motivacional con el que suelen impregnar sus actos, es un sello distintivo de los dirigentes de Cambiemos y, en esta empresa, el primer candidato a senador nacional del oficialismo, Esteban Bullrich, ha tenido sus intentos fallidos.
El más reciente y recordado de ellos fue previo a las PASO, durante una actividad con jóvenes en Pilar en la cual el ex ministro de Educación cerró su alocución con una extravagante metáfora cardiológica: “Salgan a comunicar ese enorme corazón que tienen que, no tiene un latido, tiene un cantito. No es latido, no es el ‘tu-tum, tu-tum’. Si lo escuchan bien al corazón de ustedes, los jóvenes, más que ninguno, dice –susurra-: sí, se puede; sí, se puede; -y alza la voz- sí, se puede; sí, se puede”.
La catarata de memes y burlas inundó las redes sociales, llevando al candidato de Vidal a morigerar ese tipo de ocurrencias. Pero, buscando volver a dar un cierre motivacional a su discurso de este jueves en Mar del Plata, Bullrich quiso ir a lo seguro, parafraseando una cita que, al ser utilizada hace 34 años, quedó en la historia política de nuestro país.
“Vamos a unirnos detrás de un pensamiento y un sueño común, ese que quedó grabado, que lo grabó un presidente en el 83 desde el Cabildo”, arengó el postulante oficialista al aludir preámbulo a la Constitución Nacional con el que Raúl Ricardo Alfonsín cerró varios de sus discursos de campaña y su mensaje al asumir la Presidencia.
Así, procedió a emular al ex mandatario radical –aunque, claro está, sin su contundencia oratoria- : “Consolidar la unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa común, promover el bienestar general, y asegurar los beneficios de la libertad, para nosotros, para nuestra posteridad, y para todos los hombres del mundo que quieran habitar en el suelo argentino”.
“Ese es el sueño, vamos por ese sueño”, cerró para presentar a quien cerró, como en todos los actos de campaña, el evento: la gobernadora María Eugenia Vidal.