El ministro de Gobierno de la provincia de Buenos Aires, Federico Salvai, radicó en su declaración jurada, una moto BMW 700 GS valuada en 325 mil pesos, una propiedad en San Isidro por un valor fiscal de 126.608 pesos y un depósito bancario por 265.470 pesos.
A esto se suma un salario promedio mensual por 72 mil pesos. Sin embargo, el funcionario, hombre de máxima confianza de la gobernadora María Eugenia Vidal, declara tener una deuda de 790.881 pesos, basada en un crédito hipotecario.
Aunque la sumatoria supone un fuerte déficit en las cuentas del ministro, Salvai informa, además, los bienes de su cónyuge, la ministra de Desarrollo Social de la Nación, Carolina Stanley.
En los datos declarados, se observa que la funcionaria posee un sueldo más elevado y un capital mayor al de su marido.
Stanley detenta un salario promedio mensual de 82 mil pesos. Tiene una propiedad en la Ciudad de Buenos Aires, valuada en 514.835 pesos, y un auto todo terreno de 663.100 pesos que, según consta en la declaración, fue una donación.
A esto se suman los 60.600 dólares que posee en efectivo y los depósitos por 5.942 dólares y 1.480.145 pesos, además de un monto de 200 mil pesos en efectivo que también figuran como donación. Todo lo fijado como activos e inmuebles de la ministra está a su nombre, sin ninguna división marital con Salvai.
Finalmente, el ministro de Gobierno detenta, como mayor valor patrimonial, su moto BMW. Una pasión que comparte con su amigo el titular de ARBA, Gastón Fossati. Aunque el jefe de los sabuesos lo supera ampliamente.
Fossati declara en su presentación patrimonial cuatro motos (no detalla la marca) valuadas en 400 mil, 22.900, 19.800 y 21.400 pesos.
También lo supera en propiedades, ya que el titular de la Agencia de Recaudación posee inmuebles a su nombre en la Ciudad de Buenos Aires, Vicente López, San Pedro de Jujuy, Tigre, Maldonado (Uruguay) y Tucumán.