Del gobierno de María Eugencia Vidal no habría que esperar programas ambiciosos en materia de educación, salud, innovación tecnológica, producción, turismo y cultura. Al menos eso se desprende de sus propias palabras. La mandataria dijo este jueves que, por las restricciones financieras del Estado provincial, a pesar del endeudamiento por 60 mil millones de pesos que le autorizó a comienzos de año la Legislatura, “no hay margen para nada más” que “seguridad, obras y política social”.
La mandataria djo que en la provincia de Buenos Aires “todo es un juego de presiones y tensiones sobre recursos escasos" y que "la situación es tan difícil" que "es muy fácil decidir" los ejes de su gestión.
Durante la apertura del coloquio de IDEA Joven que se desarrolló en la Ciudad de Buenos Aires, Vidal, que, desde que asumió, ha insistido en el diagnostico de la "provincia quebrada", remarcó que el "tiempo corre muy rápido en el Estado y hay mucha gente esperando decisiones". Sin embargo, destacó que "es tanta la necesidad y tan básico lo que falta que el camino que hay que tomar es el obvio".
Al definirse como "una gobernadora que cuando hay un alerta meteorológico no duerme a la noche", Vidal señaló que "lo fundamental es no perder nunca el contacto con los problemas de la gente", Y sentenció: "En la Provincia todo es un juego de presiones y tensiones sobre recursos escasos".