Un voluminoso caudal de dirigentes para enfrentar las turbulentas aguas del PJ era el escenario ideal para que Jorge “Coqui” Capitanich se zambulla en la disputa por la conducción de la estructura partidaria del peronismo. Sin embargo, el Encuentro Federal del Frente para la Victoria (FpV) realizado este sábado en la sede Avellaneda de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) se vio languidecido en su fisonomía dirigencial a partir de la ausencia de varios intendentes de peso en el orden bonaerense y mandatarios provinciales del peronismo, quienes omitieron ligar sus figuras a un evento identificado organizativamente con La Cámpora.
Allí, estuvieron algunos referentes que formaron parte del gabinete nacional durante el kirchnerismo, un puñado de intendentes encabezados por el anfitrión, Jorge Ferraresi, la gobernadora santacruceña Alicia Kirchner y un Daniel Scioli que bajo su diatriba de unidad se abraza al variopinto abanico de sectores que discuten el futuro del PJ. Así, el ex gobernador bonaerense pidió durante su alocución "no ser funcionales a quien nos quieren dividir”.
No obstante, el cónclave no tuvo la presencia de varios intendentes de distritos fuertes del conurbano, quienes han comenzado a hacer su juego sin querer saber nada con los camporistas, sindicados por muchos como los artífices del colapso electoral del pasado año. Misma postura y decisión tomaron los gobernadores peronistas que, a excepción de Alicia Kirchner, brillaron por su ausencia.
Entre otros alcaldes, no fueron de la partida este sábado Verónica Magario (La Matanza), Martín Insaurralde (Lomas de Zamora), Gabriel Katopodis (San Martín), Mariano Cascallares (Almirante Brown) Juan Zabaleta (Hurlingham), Gustavo Menéndez (Merlo). En efecto, algunos de ellos se reunieron recientemente con el sanjuanino José Luis Gioja, a quien erigen como la figura capaz de unir al arco peronista.
Amén de esto, el camporismo sigue encerrado en su juego sectario. En medio de su frenesí mediático, el diputado provincial José Ottavis cargó contra “aquellos que hoy se disfrazan de peronistas y les gusta la gestión de Macri. Deben irse al partido de la derecha”. Y postuló vía twitter: “Es necesario que @CFKArgentina y @jmcapitanich sean quienes refunden el Peronismo incorporando a otros espacios como pares dentro del Movimiento Nacional”.
En la misma línea, el ex titular del bloque FpV propuso al intendente de Moreno, el camporista Walter Festa, para la conducción del PJ bonaerense: “No tengo dudas que es el mejor compañero para llevar adelante la renovación del Peronismo en la provincia de Buenos Aires".
Estas declaraciones al calor del plenario cayeron tras denodados intentos de la agrupación juvenil por "descamporizar" el evento al advertir cómo el mismo se iba cayendo de potenciales asistentes. Misma estrategia buscó impulsa Capitanich sin éxito. Tal es así que uno de los dirigentes que se ausentó en el evento, confió a Letra P: "Si (a Capitanich) le hubiese interesado tanto nuestra presencia nos hubiese llamado".
Con las cartas ya echadas, el hoy intendente de Resistencia (Chaco) se reunió horas antes del plenario con Ottavis y Festa en Moreno, donde planteó que el “principal desafío” es “que el peronismo sea verdadera oposición”. Y añadió: “No debemos caer en un “aggiornamiento” por derecha neoliberal con el gobierno nacional, ni ceder ante las tentaciones de los procesos de cooptación que tiene el gobierno en una tendencia claramente hegemónica. Lo que necesitamos claramente es tener identidad opositora y en virtud de ello defender los intereses soberanos de nuestra Patria”.
Vale señalar que el plenario de Avellaneda comenzó con el desarrollo de una serie de comisiones de trabajo de las que participaron ex funcionarios nacionales como Aníbal Fernández, Daniel Filmus, Carlos Tomada, Agustín Rossi, entre otros. De los intendentes presentes, además de Ferraresi, estuvieron Juan Ustarroz (Mercedes), Juan Patricio Mussi (Berazategui), Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas), Francisco Echarren (Castelli), Ariel Sujarchuck (Escobar). También se pobló el cónclave de dirigentes de Nuevo Encuentro, encabezado por Martín Sabbatella, otro espacio que ahuyentó potenciales presencias peronistas.
Hacia las 18, y ya con una nutrida militancia, se realizó el acto central. Previo al cierre de Alicia Kirchner, y licuado entre las alocuciones de Leopoldo Moreau, Agustín Rossi y el Cuervo Larroque, entre otros, llegó el mensaje de Capitanich, quien, aunque no se anunciaron definiciones sobre candidaturas a la conducción del PJ, habló de dar pelea interna en caso de ser necesaria. Lo hizo flanqueado por el kircherismo duro embanderado por una dirigencia camporista que por estos días espanta más de lo que aúna.
Ese fue el bosquejo de trampolín para que el hombre de Chaco prepare su salto hacia las disputadas aguas del PJ. Habrá que ver si La Cámpora le da el margen necesario para tomar envión.