El incendio en el Parque Nacional Los Alerces de Chubut movilizó al gobernador de esa provincia, Mario Das Neves, hasta las localidades de Esquel y Trevelin para interiorizarse del accionar paso a paso de los bomberos en esa región de la Cordillera. Según trascendió, el siniestro habría sido intencional.
Como se informó, más de 1500 hectáreas fueron arrasadas por el fuego y algunas familias perdieron sus hogares.
La Administración de Parques Nacionales, a través de su página web, explicó que más de 70 brigadistas del Servicio Nacional de Manejo del Fuego, con 2 helicópteros y 2 aviones hidrantes, trabajan para controlar la situación.
“Nos preocupa la cordillera. Hay mucha gente trabajando para controlar el fuego. Gracias a los brigadistas y todos los que están”, había escrito Das Neves en sus cuentas sociales. Este sábado, de paso por las localidades andinas, se mostró muy cerca de las autoridades municipales.
Entre diciembre de 2014 y abril de 2015, como informa la organización Greenpeace, el fuego arrasó cerca de 60.000 hectáreas de bosques andino patagónicos en las provincias de Chubut, Río Negro y Neuquén, convirtiéndose en los peores incendios forestales de la historia en la región.
“Nos encontramos ante una verdadera emergencia forestal. Esto se tiene que terminar. Destruir bosques es un crimen y debe ser castigado penalmente", sostuvo Hernán Giardini, coordinador de la campaña de Bosques de Greenpeace.
Esa organización fue la que brindó un dato escalofriante en los últimos 25 años, como revela un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Argentina ingresó al triste podio de los países que más se deforestaron: 7,6 millones de hectáreas (el tamaño de la provincia de Entre Ríos), a razón de 300.000 hectáreas por año fue lo que se perdió.