La reunión de este miércoles entre el gobernador de Chubut, Mario Das Neves, y los ministros Rogelio Frigerio y Juan José Aranguren, demostró el clima tenso que existe en esa provincia por la crisis petrolera que impacta directamente en la economía patagónica. "La situación está muy complicada", advirtió el mandatario en las puertas de la Casa Rosada.
“Queremos que la provincia, el Estado nacional y las operadores aporten”, afirmó Das Neves. “Nosotros tenemos una espalda chica, la más grande la tiene el Gobierno nacional. Ayer, por un decreto, le giró a la Ciudad de Buenos Aires una importante cantidad de fondos. Las espaldas de las operadoras y la Nación son diferentes”, insistió.
"Si no se toman decisiones peligran puestos de trabajo", dijo y anticipó un potencial conflicto que mantiene en vilo a su equipo. "Chubut ha aportado siempre a la riqueza nacional", recordó.
Das Neves mantiene otra reunión con el CEO de YPF, Miguel Galuccio, para seguir en búsqueda de alicientes para el conflicto que tiene en vilo a toda la cuenca del Golfo San Jorge.
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“Chubut es la única provincia que exporta, y hoy se vende un barril que cuesta (menos costos) mucho menos que el de Neuquén. Queremos un acuerdo similar”, había dicho esta mañana el titular del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Chubut, Jorge Ávila.
“Mañana se hará una asamblea con miles de trabajadores. Tenemos el apoyo político de los intendentes y del gobernador, Mario Das Neves. No la vemos con mucha expectativa. Los Ceos no entienden la política. Queremos ayuda”, aseguró Ávila.
Sobre el rumor del posible despido que iría entre 5 mil y 6 mil trabajadores, reconoció: “Es el número que se está manejando”.
Las petroleras, que no estaban en la mesa, estarán el próximo martes en Casa Rosada junto a las partes que esperan una importante asamblea con más de 20 mil trabajadores para este jueves.