Néstor Grindetti, intendente de Lanús
Las elecciones primarias dejaron al macrismo en una situación con buenas perspectivas para pelear distintas intendencias de la provincia de Buenos Aires. Uno de los casos más resonantes se da en Lanús, donde el candidato por el frente Cambiemos, Néstor Grindetti, buscará dejar sin efecto las aspiraciones del postulante del oficialismo, el camporista Julián Álvarez.
Después de participar con boleta corta en 2011, el ministro de Hacienda de la Ciudad se impuso en la disputa interna de su espacio, que alcanzó el 30,2% de los votos, cinco puntos por debajo del secretario de Justicia de la Nación.
“Quedamos muy cerca de poder llegar en octubre. Con dos meses y medio más de tiempo, tocando timbre y tomando mates con los vecinos, podemos llegar a muchos más vecinos”, resumió el postulante macrista.
En la misma línea, apuntó contra el candidato del FpV, a quien comparó con el actual jefe comunal Darío Díaz Pérez. “Álvarez dijo que es la continuidad de la política del actual intendente. Es decir que es más de lo mismo, no va a cambiar nada porque él mismo lo ha ratificado”, expresó.
En declaraciones radiales, afirmó que “el cambio que la gente está buscando va a venir dado de la mano del PRO”, y vaticinó “una muy buena elección en octubre”.
Incluso, dio detalles de lo que serán sus primeras medidas de gobierno si alcanza la intendencia del municipio de la zona sur del Gran Buenos Aires. “En lo inmediato, vamos trabajar con una presencia muy fuerte en el espacio público, para generar un círculo virtuoso entre el Estado y el vecino”.
Para finalizar, trazó como uno de sus principales objetivos de gestión terminar “con la fuerte resignación de la gente”.