El primero en terminar con los gestos ambiguos fue Juan Manuel Urtubey. El gobernador salteño anunció a principios de junio su apoyo explícito a la candidatura presidencial de Daniel Scioli. Así volvió a reflotar el rumor de que podría convertirse en compañero de fórmula del bonaerense. Pocas horas después, Florencio Randazzo intentó equilibrar la balanza. “Me gustaría que mi vice fuera (Jorge) Capitanich”, lanzó el ministro. A la espera de las definiciones presidenciales, todos dejaron crecer las especulaciones.
Aunque el ministro Axel Kicillof, Máximo Kirchner y el secretario general de la Presidencia, Eduardo “Wado” de Pedro siguen sonando como posibles compañeros de fórmula de los presidenciables del Frente para la Victoria, en el oficialismo hay quienes piensan que lo ideal sería llevar a un gobernador como candidato vice, sobre todo porque será quien debe garantizar el manejo del Senado, un reducto de pesos pesados, donde el kirchnerismo perderá al jefe de bancada, Miguel Ángel Pichetto.
En ese escenario comenzaron a sonar los nombres de gobernadores que podrían acompañar en la fórmula. Aunque durante mucho tiempo de habló de José Luis Gioja como coequiper de Scioli, el sanjuanino quedó afuera de la lista por razones de salud. Otro posible candidato sigue siendo Sergio Urribarri, quien se bajó de la carrera presidencial y no tiene reelección en Entre Ríos. Urribarri sería un buen guardián de la filosofía kirchnerista, según el cristinismo. El mendocino Francisco “Paco” Pérez y el santiagueño Gerardo Zamora, encolumnados con Scioli, también quedaron en la mira. Pero al percibir los acercamientos entre el sciolismo y Zamora, Cristina mandó al presidente provisional del Senado directo a la lista de candidatos para el Parlasur.
Sobre el tramo final de la etapa de especulaciones sobre las listas, se sumó al juego Urtubey. El gobernador, que obtuvo un aplastante triunfo en Salta el 17 de mayo – 51 por ciento de los votos – había clausurado la posibilidad de ser candidato a vicepresidente, pero ahora dejó la puerta entreabierta. “Si la Presidenta me pidiera que fuera vice, le diría que consigamos otro. Los salteños me eligieron para gobernar”, dijo después de los comicios.
Pero tras el apoyo de Urtubey a Scioli y la aparición de la dupla en Santa Fe, acompañando a Omar Perotti, volvió a surgir el rumor de una posible fórmula presidencial, que ahora el salteño no descartó con tanta firmeza. “Para mí es muy difícil, acabo de ser electo. Lo estoy acompañando a Daniel fuertemente. Él hablará con Cristina y tomarán la decisión de cómo armar la fórmula”, alimentó la especulación el gobernador de Salta, que se convirtió en el vocero perfecto de la candidatura de Scioli, con su amplio triunfo y su discurso claro como cartas de presentación.
La respuesta inmediata de Randazzo fue su acercamiento a uno de los gobernadores más identificados con la Presidenta, Capitanich. “Es un gran compañero. Vino en momentos muy difíciles a formar parte del Gobierno, cuando Cristina no estaba bien porque que tenía un problema de salud”, recordó Randazzo en diálogo con radio Del Plata cuando le consultaron por la posibilidad de que el chaqueño fuera su candidato a vice. Desde el entorno de Capitanich dijeron que las palabras del ministro fueron “una sorpresa” para el gobernador, quien no salió a desmentir a Randazzo, permitiéndole así nivelar la balanza con Scioli. “Capitanich va a hacer lo que le pida Cristina. Cada vez falta menos para saberlo”, dijeron desde Chaco.
La Presidenta comenzará este fin de semana a achicar las posibilidades. No viajará a El Calafate y se quedará en Olivos terminando de evaluar estrategias electorales. Tanto Scioli como Randazzo aseguraron que charlarán con Cristina sobre sus compañeros de fórmula. Por las dudas, los dos compitieron en sus elogios a Máximo Kirchner en las últimas horas. Será ella quien tenga la última palabra.
