El evento tuvo recepción, presentación, fotógrafos, discursos, entrada, plato principal, postre y brindis. También, hubo lugar para soplar las velitas: los presentes le cantaron el feliz cumpleaños a la pareja de la senadora, el empresario Juan Tonelli.
Para ingresar al coqueto salón de La Rural los invitados debieron atravesar un vallado en el que jóvenes voluntarios de la fundación le tomaban los datos y les indicaban las mesas asignadas. Antes de esa parada, funcionarios, empresarios y figuras de la televisión de topaban con actores disfrazados de distintos personajes icónicos del cine extranjero: Darth Vader, El Guasón, Harry Potter, Charles Chaplin y Marilyn Monroe.
Adentro, estaba la rosca, las charlas y los análisis de que pasó, lo que pasa y lo que pasará. En el lobby del predio ubicado en Palermo, los mozos llevaban bandejas con empanadas, cazuelas y servían bebida, mientras los invitados conversaban. En tiempos de transición y danza de nombres para gabinetes, el tema central fue la política; aunque algunos prefirieron hablar de fútbol y comentar sobre el clásico de Avellaneda que se jugó el domingo.
Intercambio de opiniones sobre nombramientos, ofertas de trabajo en conjunto, explicaciones de las nuevas áreas que se verán en los distintos gabinetes y hasta análisis sobre el futuro de la presidenta de la Nación, entre los temas más recurrentes que se escucharon en el hall del salón central durante la noche.
“Cuando dejen de cuidarla y de protegerla, va a quedar evidencia de que está chiflada”, comentó risueño un diputado nacional ante las miradas de sus interlocutores que no comprendían si reírse o guardar silencio. Hacía alusión a la figura de Cristina Fernández de Kirchner y a un “blindaje judicial” que, según el legislador, ostenta la primera mandataria.
Siguiendo con el tópico judicial, hubo quienes analizaron las palabras de Elisa Carrió -una de las grandes ausentes junto a María Eugenia Vidal- en el programa de Mirtha Legrand del fin de semana, desde donde disparó munición gruesa contra Daniel Angelici. “Molestó lo que dijo, pero el Tano no va a dejar de dialogar con los jueces por lo que diga Carrió”, explicó a este portal uno de sus colaboradores. “Mañana Mauricio va a Boca a bancarlo, no hay reproches”, indicó un operador amarillo que paseaba por cada mesa para conversar.
La electa gobernadora bonaerense no participó del evento pero avisó una hora antes del comienzo que tenía que resolver problemas de cara a su debut en la provincia de Buenos Aires y se le hacía “imposible” llegar hasta el predio ubicado en Avenida Sarmiento.
El reelecto intendente de Vicente López, Jorge Macri, fue de los primeros en llegar y avisó de entrada que no se quedaría a cenar, en su entorno rebalsaban de alegría por el doble cargo que ostentará el primo del líder del partido: jefe comunal y titular del Grupo Provincia.
El electo jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, que llegó acompañado de su esposa, Bárbara Diez, no se quedó a la cena y tampoco alcanzó a escuchar la presentación a cargo del modelo Iván de Pineda, que confirmó que no integrará el gabinete porteño. El todavía jefe de Gabinete estaba ofuscado porque aún no podía terminar de cerrar su gabinete, aunque durante la tarde se despejó una de las incógnitas: Soledad Acuña estará al frente de Educación.
Minutos después ingresó el compañero de fórmula de Larreta: Diego Santilli entró de la mano de su pareja, la modelo Analía Maiorana, y apenas cruzó la puerta se fundió en un abrazo con Guillermo Montenegro, el ministro porteño que tiene destino incierto, aunque podría recalar en una embajada.
Macri llegó acompañado de su mujer, Juliana Awada, y lo hizo en el momento en que ya era tiempo de pasar al salón y ubicarse en las mesas. Rápidamente, fue al encuentro de Michetti para tomarse una fotografía y acompañarla a la mesa principal, donde también estuvieron los futuros ministros del gabinete nacional Esteban Bullrich (Educación), Rogelio Frigerio (Interior) y Oscar Aguad (Comunicaciones).
Tuvo una intervención brevísima antes de que se sirviese la cena y lanzó un mensaje a sus dirigidos: “Este partido de una Argentina que soñamos lo vamos a jugar todos. Tenemos una enorme tarea por delante”.
El todavía titular de la UCR, el mendocino Ernesto Sanz, también se ubicó en la mesa número uno y todo aquel que lo saludaba le preguntaba lo mismo: “¿Qué vas a hacer?” En la misma mesa hubo lugar para la modelo Valeria Mazza y su esposo, el empresario Alejandro Gravier.
Otros miembros del futuro gabinete de la Nación que dijeron presente pero no tuvieron lugar en la mesa central fueron Andrés Ibarra (Modernización) y Patricia Bullrich (Seguridad).
Otra de las figuras de la noche fue el fiscal José María Campagnoli, que se sorprendía con un pedido repetido por varios de los invitados que le acercaban y le pedían: “Tenés que ser el Procurador”. “A mí no me ofrecieron nada”, se apuraba a responder el fiscal que tuvo a su cargo la causa de lavado de dinero contra el empresario Lázaro Báez.
Estuvo también el titular de la Sociedad Rural y anfitrión, Luis Miguel Etchevere, que hasta último momento sonó para integrar el gabinete económico de Cambiemos pero, para evitar fisuras internas, Macri desechó la idea. Sin embargo, deambulaba por el coqueto salón festejando la promesa de eliminar las retenciones al trigo y al maíz, que anunció el futuro ministro de Agricultura, Ricardo Buryaile.
Hubo espacio para figuras del espectáculo y los medios. María O’Donnel, Alfredo Leuco, Magdalena Ruíz Guiñazú, Marcelo Bonelli, Ari Paluch, Fabián Doman, Débora Plager, Mariana Arias, Leonor Benedetto y Fernando Carnota acompañaron a Michetti en la gala de su fundación. También, estuvieron los embajadores de Suiza, Israel, India, Taiwan, Australia, Canadá, Alemania, Emiratos Árabes Unidos y España.
El que más tarde llegó fue el futuro jefe de Gabinete de la Nación, Marcos Peña, que llegó a las 23. Apenas ingresó se fue a saludar a los integrantes de la mesa 21, la mesa de los verdugos de los barones del PJ en el conurbano: Diego Valenzuela (Tres de Febrero), Nicolás Ducoté (Pilar) y Martiniano Molina (Quilmes).
Después se trasladó hacia la mesa principal a saludar a Macri, que ya estaba por abandonar el salón junto a Awada. Por ese entonces, las modelos Teresa Calandra y “Teté” Coustaurot condujeron la subasta en la que se remataron camisetas de Boca (por 22 mil pesos), de River (por 31 mil pesos) y obras del artista Milo Lockett. Mientras tanto, los invitados degustaban el postre: brownie con una bocha de helado y frutos del bosque.
Paradójicamente, los michettistas tuvieron un perfil bajo en la gala de su líder. Daniel Chaín charló amistosamente con el diputado Pablo Tonelli y luego se movió por cercanías a la mesa principal. El actual ministro de Desarrollo Urbano desembarcará en AYSA y tendrá a cargo una dependencia dedicada a obras de arquitectura, hidráulicas e hídricas.
Hernán Lombardi compartió mesa con las periodistas Magdalena Ruíz Guiñazú y Cristina Peréz. El futuro encargado de los medios públicos estuvo a última hora dando entrevistas a radios. El legislador Helio Rebot se mantuvo al margen de los flashes y ya practica su rol como secretario administrativo del Senado, lugar al que llegará por pedido expreso de Michetti.
También estuvieron Federico Pinedo, Laura Alonso, Alejandro García, Carmen Polledo, Francisco Quintana, Enzo Pagani, Héctor Huici, César Torres, Oscar Moscariello, Walter Clix, Lidia Saya, Martín Borreli, Gerado Milman, entre otros.
La Fundación
La Fundación SUMA es una organización que impulsa la gestión asociada entre el sector público, el sector privado y la sociedad civil, para realizar proyectos y acciones solidarias. Actualmente, tiene sedes en Córdoba, Mendoza y Salta.
Los números de la gala
Desde la organización calcularon que asistieron cerca de 700 personas e informaron que el precio del cubierto fue de $1500, mientras que las más de 60 mesas, algunas compradas por empresas, como por ejemplo Urbaser, oscilaban entre los 40 mil y 80 mil pesos, dependiendo la ubicación. Todo lo recaudado será destinado para la fundación y sus proyectos solidarios.