Política

El PJ denunció un complot para desestabilizar al Gobierno: “Exigimos el cese de la mentira”

Letra P.- En congreso extraordinario, la plana mayor del Partido Justicialista (PJ), lamentó la muerte del fiscal Alberto Nisman. Apuntó contra jueces, fiscales, los servicios de inteligencia y el Grupo Clarín junto al Diario La Nación, de “enlodar al gobierno”.

El Partido Justicialista (PJ) salió con los tapones de punta a respaldar a Cristina Fernández de Kirchner tras la muerte de Alberto Nisman y denunció un complot para desestabilizar al Gobierno. “La persistente estrategia de articulación de mentiras sistemáticas de medios de comunicación opositores, principalmente Clarín y La Nación, pretender enlodar la figura política de nuestra Presidenta”, aseguró la plana mayor del partido en un documento que fue avalado por varios gobernadores, ministros y los principales dirigentes del kirchnerismo. Hubo incomodidad en el sciolismo por el tono fuerte del texto, elaborado en la Rosada.

 

“No olvidemos la generosa producción de nefastas profecías que se vierten en cascada. Los agoreros de siempre presagiaban un dólar a 20 pesos, estallidos sociales para diciembre, caída de reservas e inflación incontrolable. Nada de esto ha ocurrido. Pero la hostilidad continúa y se redobla”, leyó el apoderado Jorge Landau en el centro del auditorio del edificio de la calle Matheu, rodeado por las principales figuras del PJ. Lo escucharon atentos los gobernadores Daniel Scioli, Juan Manuel Urtubey, Eduardo Fellner, Sergio Urribarri, Francisco “Paco” Pérez, el jefe de Gabinete Jorge Capitanich, el ministro Agustín Rossi, Julián Domínguez, Juan Manuel Abal Medina  y referentes camporistas ubicados en las dos primeras filas. Algunos se sorprendieron en vivo con las palabras del apoderado y no lograron disimular su incomodidad. Detrás de todos, desde el fondo del escenario, siguió el discurso el menos sorprendido, Carlos Zannini, uno de los cerebros del borrador.

 

Los principales dirigentes comenzaron a llegar al edificio a partir de las 17, horario en que había sido fijada la convocatoria. Pero la lectura del documento se produjo pasadas las 18.30, una vez que llegó a la sede el gobernador Scioli, a quien todos esperaban especialmente para que no quedara afuera de la foto de respaldo a la Presidenta. El documento elaborado en base a la primera versión que elaboraron Zannini y Capitanich fue sufriendo modificaciones y aportes de los demás miembros del Consejo Nacional del PJ en ese lapso de tiempo. Algunos marcaron sus disidencias. “Yo hubiese empezado con las condolencias y el lamento por la muerte de Nisman”, admitió por lo bajo uno de los asistentes. Aunque no se lo vio sobre el escenario, el histórico operador Juan Carlos Mazzón también estuvo en el edificio y participó de las discusiones en la redacción del documento. Para cuando llegó Scioli – que entró y salió sin hacer declaraciones- el texto ya estaba listo. En el entorno del gobernador reconocieron que el documento “no es el estilo de Daniel, que es mucho más moderado”.

 

En la previa se había planteado dos líneas de acción: una que promovía un texto más moderado, que incluyera un respaldo a la Presidenta, compromiso con las instituciones y el pedido de esclarecimiento de la muerte de Nisman, y otra posición, más dura, que planteaba cuestionamientos a los medios de comunicación y a los “grupos económicos concentrados”.  Pero la postura más dura ganó la batalla en la redacción del documento. “Exigimos el cese del uso  de la mentira, la calumnia y la difamación como herramienta política al servicio de oscuros intereses”, arrancó el texto, para no dejar lugar a dudas.

 

Las dos posturas quedaron plasmadas con las declaraciones que los dirigentes fueron haciendo en la puerta del edificio, a medida que fueron llegando. “Me cansé de decir que en los últimos tiempos hubo corridas cambiarias, sedición policial en seis o siete provincias, jueces que hacen denuncias mediáticas, fondos buitres que manipulan información, dirigentes opositores que se muestran ingenuos y operan todo el tiempo para los grupos concentrados y todos con el mismo objetivo: perjudicar y desestabilizar a nuestra Presidenta”, disparó Urribarri antes de ingresar. En la misma línea, el diputado Carlos Kunkel dijo no tener dudas de que la muerte de Nisman “fue un crimen” y planteó la necesidad de “reformular” la Secretaría de Inteligencia. El ministro Rossi también abonó la teoría del homicidio: “El Gobierno no cree en la teoría del suicidio. No queremos que este caso quede impune”.

 

Fiel a su estilo, más cauto se mostró el gobernador Urtubey. “Hay que pedirle a la Justicia que tenga celeridad para investigar y garantizar la institucionalidad”, remarcó el salteño. Sin hacer declaraciones pasaron el senador Miguel Ángel Pichetto, el ministro Julio De Vido, el sindicalista Antonio Caló y la diputada Juliana Di Tullio, entre otros. Llamó la atención la ausencia del ministro Florencio Randazzo, que a esa hora fue convocado por la Presidenta a la Quinta de Olivos para conversar sobre temas de gestión, según explicaron voceros del Ministerio.

 

En línea con las declaraciones que viene haciendo el Gobierno desde el día lunes, el documento incluyó menciones a los servicios de Inteligencia. “No cabe la menor duda de que asistimos a otra muestra de las peores prácticas de servicios de inteligencia con fines extorsivos cuyos móviles es convertir a víctimas en victimarios y generar dudas y sospechas con la inconfesable finalidad de ocultar hechos trágicos que forman parte de nuestra historia reciente”, dice un párrafo del texto, que afirma que “los ataques públicos” que sufre el Gobierno siempre vienen de los mismos actores: “denunciantes profesionales, fiscales y jueces que propician el golpismo judicial, operaciones de inteligencia y medios de comunicación opositores”. Además pide que la investigación judicial de la muerte de Nisman “se esclarezca en forma inmediata a los efectos de determinar fehacientemente la causa de su deceso, porque esto implicará conocer quien presionaba, extorsionaba o ¿dirigía? al mismo”, en clara referencia a su supuesto contacto con los agentes de la ex SIDE.

 

“No tenemos duda que la mugre que rodea esta causa exige limpieza de métodos y procedimientos, y precisamente exige las actitudes que ha tomado nuestra Presidenta para que definitivamente el pueblo argentino sepa la verdad y no dependamos de agentes de inteligencia que representaron en muchas épocas de nuestra historia lo peor de la política y que hoy son arietes de grupos de poder nacionales e internacionales que en una clara actitud golpista pretenden enlodar un proyecto político al servicio de la mayoría del pueblo argentino”, expresa el texto. En este sentido, fuentes del kirchnerismo en el Congreso aseguran que el Gobierno está evaluando la posibilidad de enviar un proyecto para modificar la ley de Inteligencia. El debate podría darse en sesiones extraordinarias, en el mes de febrero.

 

El documento también criticó a los medios por “las operaciones mediáticas” referentes a la causa Hotesur, “las permanentes denuncias sobre las declaraciones  juradas presentadas por la Presidenta”, “los artículos que aparecen denunciando la existencia de cuentas en el exterior, casi siempre en destinos exóticos” y los acusó de ocultar, desinformar y no investigar “las más de cuatro mil cuentas no declaradas en Suiza”, porque pertenecen “a caracterizados personajes del empresariado o de la oposición política”. Además aseguró que “una denuncia carente de sustento respecto a supuesto encubrimiento de la causa AMIA, ataques especulativos destinados a propiciar la fuga de capitales, falsas profecías respecto a estallidos potenciales contrastan permanentemente con el récord de turismo interno, argentinos disfrutando de sus vacaciones, estabilidad cambiaria, fortalecimiento de reservas y estabilidad de precios”.

 

La lectura culminó con la aprobación por unanimidad de los dirigentes presentes. Desde la Rosada se había bajado una línea clara: asistencia perfecta, una foto que mostrara un respaldo contundente a la Presidenta y que dejara la certeza de que todo el PJ navega unido en el mismo barco, aún si hay posibilidades de naufragio.

 

Comunicado completo

 

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