“Vi lo de San Pablo (Brasil), la cantidad de manifestantes y el nivel de agresividad, como que quieren romper todo”, manifestó Berni en declaraciones a una radio porteña y aclaró respecto a la represión policial que “si pasa algo así acá, el que va preso soy yo”.
En tal sentido, el Secretario de Seguridad remarcó la diferencia entre los tiempos de respuesta requeridas a las autoridades nacionales y a las de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, cuando los efectivos policiales deben actuar ante piquetes que interrumpen el tránsito.
Berni se refirió a la resolución de lo que se dio en llamar “acampe villero” en el Obelisco y aseguró que “el Gobierno de la Ciudad tiene un letargo cuando debe resolver estos problemas. Después de 50 días recién lo solucionó. Lo importante es tener voluntad”.
“Cuando trabajamos con la Justicia Federal vemos que son comprometidos, responsables. Pero en el ámbito de la ciudad de Buenos Aires, con la justicia contravencional y ordinaria ya vimos lo que ha pasado”, expresó.
Las autoridades de la Ciudad Autónoma “están del lado de los que cortan” el tránsito, finalizó.
El jueves, a horas del inicio de la Copa del Mundo, la sede del partido inaugural fue epicentro de protestas con represión policial.
La principal se produjo en la estación Carrao del metro paulista, al este de la ciudad, con movimientos sociales que se oponen a los gastos que le genera el Mundial al Estado brasileño.
Los agentes policiales reprimieron con gases lacrimógenos y balas de goma, con imágenes desde lo ocurrido por periodistas de todo el mundo que acompañaban el acto en el momento en que se desataron los disturbios.