Recalde: “La ley de Promoción del Trabajo Registrado beneficiará a 300 mil trabajadores por año”

Según Recalde, la importancia del proyecto radica en que las microempresas ocupan mucha mano de obra pero, a su vez, tienen una gran cantidad de trabajadores no registrados. Para el diputado, “la ley podría beneficiar a 300 mil trabajadores en un año”.

Si bien el proyecto prevé una baja en las contribuciones patronales, para el oficialismo eso no tiene por objetivo lograr que baje la tasa de desempleo. “Eso era la política de los 90’. De todas maneras, por la mecánica puede ser que,de forma marginal o como un efecto colateral, sí se pueda generar algún empleo. Tal vez si algún empleador está dudando si toma o no a un trabajador y ve que tiene reducido su costo laboral, se inclina por tomarlo. Pero el objetivo fundamental de este proyecto es que se registren los trabajadores que están en negro”, explicó.

Además de la baja en las contribuciones como incentivo para lograr el blanqueo de personal, el proyecto prevé sanciones para los empleadores que no regularicen la situación de sus empleados. “La ley prevé multas, las empresas pierden beneficios de contratación con el Estado y otros beneficios de los que gozaban.Y lo más importante es la creación del registro de empresarios que violan los derechos de los trabajadores a la seguridad social. Como es un registro público, cualquiera podrá verlo y eso propicia la condena social”, dijo.

El Registro Público de Empleadores con Sanciones Laborales incluirá a todas las empresas que no registren a sus trabajadores y contraten a niños o adolescentes fuera de los límites legales o incurran en trata de personas para el trabajo forzado.

El proyecto fue votado por el Senado el 30 de abril y obtuvo dictamen de mayoría en el plenario de comisiones de Legislación Laboral y de Presupuesto la semana pasada. Con cuestionamientos parciales, la oposición – a excepción del PRO, Unidad Popular y la Izquierda, que presentaron dictámenes de minoría – apoyó el texto.

Suspensiones y despidos

Con el Gobierno preocupado por las suspensiones en la industria automotriz, Recalde consignó que la raíz del conflicto está en los problemas que tiene Brasil. “Sabemos que ambos gobiernos están analizando la posibilidad de solucionar el tema, pero hay que clarificar cuál es la extensión del problema. El otro debatí con el director de una consultora que terminó diciendo que, de acuerdo con las conclusiones que sacan por la lectura de los diarios – no por el trabajo de campo- el universo de trabajadores afectados es del 0,02 por ciento. Por supuesto que a mí me conmueve un solo despido o una sola suspensión, pero hay que poner los números en contexto”, sostuvo.

De acuerdo con el oficialismo, la industria automotriz emplea a unos 12 mil trabajadores, a quienes viene aplicando suspensiones de un día por semana, con el pago del 75 u 80 por ciento del sueldo bruto. “Eso prácticamente no se siente en el bolsillo del trabajador”, agregó.

De acuerdo con los números que el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, aportó en su última visita a la comisión Laboral, “la cantidad de despidos del primer cuatrimestre de 2014 es igual a la de 2013 e inferior al primer cuatrimestre de 2012”. En función de eso, para Recalde “hay alguna prensa hegemónica que publica en tapa alarmantemente que vienen las suspensiones y los despidos, cuando no es cierto. Esto tiene una carga negativa, porque si un trabajador lee el diario, se asusta. Y cuando el trabajador tiene miedo baja su defensa, y sus derechos laborales”.