El lanzamiento del Frente Amplio UNEN, entre el entusiasmo y la incomodidad

“Compartimos un conjunto de ideas y valores fundamentales:la búsqueda dela  libertad y de la igualdad como  objetivos inseparables de un sistema democrático; la creencia en el  estado de derecho republicano; en una ética pública que no admite  la corrupción ni la impunidad; y en un Estado fuerte y eficiente para garantizar el goce de los derechos individuales, sociales y  políticos reconocidos por la Constitución Nacional”, leyó Brandoni desde el escenario, después de la transmisión de dos videos con bajo contenido político y alta dosis patriótica, y de que Jairo entonara el himno nacional.

En primera fila aplaudían con entusiasmo los dirigentes que luego subirían a firmar el documento. Elisa Carrió, sonriente, sentada entre Ernesto Sanz y Julio Cobos. Al lado de Sanz, Hermes Binner, seguido por Pino Solanas y Margarita Stolbizer.Una vez terminada la lectura de Brandoni, llegó el momento de sellar públicamente el acuerdo, que incluyó el compromiso de los partidos a definir las candidaturas en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), y una declaración de principios para el desarrollo de un futuro programa de gobierno.

Los primeros en ser llamados al escenario fueron los radicales Sanz y Cobos. El clásico “volveremos a ser gobierno como en el ´83” sonó fuerte en el Broadway, y el radicalismo marcó la cancha. Mientras los mendocinos agitaban los brazos – Cobos refiriendo con los dedos a la tradicional lista 3- en segunda fila aplaudía Ricardo Alfonsín y desde sus butacas sonreían los históricos Juan Manuel Casella, Facundo Suárez Lastra, Federico Storani, Rodolfo Terragno; Ricardo Gil Lavedra, el neurocirujano Facundo Manes, Oscar Aguad, Mario Barletta, Nito Artaza y el gobernador de Corrientes, Ricardo Colombi, entre otros.Lo que se dice un despliegue de figuras de peso, que se sumó a los militantes que, contrariamente a lo que se había acordado, desplegaron banderas en la puerta del teatro.El apoyo también incluyó en las butacas a la ex aliancista Graciela Fernández Meijide y al músico César “Banana” Pueyrredón. “Estamos muy contentos de haber podido reunir a  quienes, aun con diferencias, tienen voluntad de trabajar juntos en este Frente”, le decía Alfonsín a Letra P.

Después le tocó el turno a Binner, que firmó, representando al socialismo, junto a Roy Cortina. Por el Gen, Stolbizer subió junto al intendente de Rivadavia, Sergio Buil. Los siguieron Humberto Tumini y Victoria Donda, por Libres del Sur, que hicieron estallar a sus militantes, los más ruidosos de la noche, con sus “patria sí, colonia no”, y los cantos contra “la derecha”. La Coalición Cívica estampó su compromiso con Carrió y Pablo Javkin, y llegó la ovación para Lilita; Proyector Sur con Solanas y Alcira Argumedo; el Partido Socialista Auténtico, con Mario Mazzitelli y Virginia González Gass. Luis Juez y Norma Morandini, por el Frente Cívico de Córdoba y cerraron, sin representar a ningún partido, Martín Lousteau –que llegó último al teatro- y Alfonso Prat Gay, que recibió un cálido aliento de los jóvenes de Libres del Sur.

Con todos los dirigentes sobre el escenario, el teatro quedó demasiado chico para tanto partido, no sólo porque las 1500 butacas resultaron más que insuficientes para los cerca de 800 dirigentes invitados, la prensa y los militantes que – sin saber que necesitaban tener una entrada para ingresar- se agolparon en la puerta, sobre la avenida Corrientes, de manera caótica, sino por la heterogeneidad que mostró la noche, reflejadas en las complejidades que tuvo la organización del acto.

La mesa de organizadores decidió que la noche no tuviera oradores para evitar problemas “de cartel” y pujas de protagonismo, pero por lo bajo hubo quienes comentaron que, en realidad, el problema se debió a que el radicalismo no pudo designar a un único orador que representara al espacio. “La idea era que hablara uno por cada partido. Incluso el FAP podía acordar que Binner hablara en nombre de todos, pero los radicales querían que hablaran los dos, Cobos y Sanz, así que al final no habló nadie”, comentó un dirigente del FAP en la provincia. Así terminaron tantos dirigentes sobre el escenario.

Las internas del radicalismo – y el protagonismo, reflejado en la inundación de apellidos no renovados en el acto – inquietan a varios integrantes del espacio, que temen quedar presos de la estructura de la UCR y sus conflictos, a los que atribuyen – junto con las declaraciones de Carrió- la introducción de la discordia con el factor Macri.

El tema de la posible alianza con el jefe de Gobierno sobrevoló el lanzamiento de FAUnen –y terminó restándole un poco de brillo, opacando la presentación con la pregunta insistente – para fastidio de algunos protagonistas. “No sé de dónde sale esa pregunta. Nosotros siempre decimos que no y nos vuelven a preguntar”, respondió Binner antes de ingresar al acto. Solanas también marcó su posición: “En ninguna reunión del Frente Amplio UNEN se planteó ese problema, porque para nosotros ese problema no existe”.El radicalismo usó fórmulas más ambiguas para hacerle frente a la cuestión. “Se puede discutir. Es un espacio socialdemócrata que tiene que pensar en gobernar acordando con otras fuerzas”, deslizó Cobos. Hasta Lousteau se mostró abierto a la posibilidad. “Si Macri quiere entrar y está dispuesto a perder para construir en este espacio, no veo por qué no”, dijo el economista.

En el espacio constituido por el FAP, sumado a Proyecto Sur, se sabe, el tema Macri no tiene discusión posible y esa es, precisamente, la incomodidad que pesa en el ambiente, más allá de las declaraciones de optimismo de los dirigentes y los compromisos firmados.

La presentación del Frente Amplio UNEN dejó instalada una alternativa de poder no peronista concreta para 2015 y varios candidatos en la carrera. Por delante, los dirigentes del espacio tienen el desafío de despejarlas dudas que sobrevolaron el acto de ayer, y de lograr que los cantos de los militantes confluyan en uno solo.