César Cigliutti, presidente de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA), y su marido Marcelo Suntheim destacaron que “cuando hay una persona trans en la fila para votar compuesta por varones y mujeres, o a una pareja de gays, la democracia se hace más fuerte porque esas situaciones reflejan más pluralismo, lo que era inimaginable hace poco más de 10 años”.
Por su parte, Lohana Berkins, dirigente trans de la Asociación de Lucha por la Identidad Travesti (ALIT), votó con “agradecimiento, justicia y memoria, porque es el ingreso con dignidad de las compañeras travestis al sistema democrático”.
“En 30 años de democracia muchos sectores que vivimos aprisionados por la ley empezamos a entender qué es la plena democracia, no sólo por el hecho de poder votar sino también por la posibilidad de ser elegidas”, sostuvo en diálogo con Télam.
Durante las elecciones primarias, las personas trans pudieron por primera vez votar con su nuevo documento que refleja la identidad de género autopercibida, aunque algunas aun no figuran en el padrón, como Lohana, a quien se le otorgó un permiso especial para poder votar con su identidad.
“Llamamos a toda la comunidad a votar porque sabemos que es importante elegir a quienes van a seguir profundizando nuestros derechos en un modelo real de inclusión de la comunidad”, sostuvo.
Del mismo modo, Virginia, casada con Paula desde principios de 2011, luego de la sanción de la ley de Matrimonio Igualitario, dijo que “votar siempre es un momento importante, y ahora es más feliz porque lo hacemos en familia y con leyes que nos amparan y protegen”. Ambas, tienen a Sabino, de dos años, quien fue inscripto en el Registro Civil con sus dos mamás, que pertenecen a la agrupación Lesmadres.