Finalmente, el nuevo impuesto se sancionó y se aprobó en junio luego de varias idas y vueltas y sesiones caídas. Lo aprobado significó, en medio año, una recaudación adicional de 330 millones de pesos. Pero ante el reproche de los ruralistas también la legislatura se encargó de sancionar declaraciones de emergencia o desastre agropecuario por las inundaciones y las sequías que se dieron durante el año pasado y así muchos productores quedaron exentos de pagar estos tributos.
Aunque pese a que gobernador Daniel Scioli descartó un nueva suba al impuesto -el cual estuvo congelado por 15 años antes de la sanción del 2012- hasta que termine su mandato, se crearán comisiones mixtas para debatir impuestos al campo, la cual comenzará a funcionar el próximo miércoles cuando técnicos de bonaerenses y referentes Carbap, Federación Agraria Argentina Sociedad Rural y Coninagro se vean las caras.
Por lo pronto, los número estiman que los productores no sufrieron las pérdidas anunciada. Lo sancionado significó que el tributo llegó a representar 2,9 por ciento de los ingresos tributarios. Mientras que para el 2013 se estima que subirá hasta el 3 por ciento de los recursos; cerca de los 1800 millones de pesos.
Y según la historia todavía sería posible aumentar la presión tributaria sobre el sector hasta conseguir que el tributo represente, por lo menos, el 5 por ciento de la recaudación total.
Con todo este panorama favorable para el sector, igualmente y ante el lobby de las entidades, la reunión del próximo miércoles servirá para analizar posibles morigeraciones en el impacto del revalúo fiscal de campos en los distritos del sudoeste provincial y en el esquema impositivo de ‘multipropietarios’ aprobado en noviembre pasado en la Legislatura y fuertemente resistido por los ruralistas.