Si bien hace unas semanas la plana mayor del kirchnerismo y del sciolismo, que participa de la vida interna de Boca Juniors, tomó como centro de la batalla la elección en el club de la ribera, el mismísimo vicepresidente electo Amado Boudou intervino para que el otro tano, José Beraldi, decline su postulación y apoye la candidatura de Jorge Amor Ameal. Tan intensa fue la movida, que llevó al Gobernador provincial a sacarse una foto con Ameal ratificando su apoyo.
La futura Ministra de Economía bonaerense Silvina Batakis, que participó como fiscal en una de las mesas, desde su cuenta de twitter increpó a los seguidores del representante del macrismo, Tano Angelici, y la elección pasó a ser una contienda más en el calendario electoral entre el Jefe de Gobierno porteño y el oficialismo nacional.
A pesar que las aguas estaban claramente divididas, el Intendente ultra K que se jactó de las grandes obras recibidas por parte de la gestión nacional y recibió por video conferencia el apoyo de la Presidenta en la inauguración del Polideportivo de Mar Chiquita “Juan Domingo Perón”, desobedeció las ordenes y jugó de lleno en el armado macrista.
La movida llevó a uno de los sindicalistas K, Víctor Santa María, a jugarse de lleno en la elección en contra de Angelici ya que, para las huestes K, lograr arrebatarle el poder en la institución al Jefe de Gobierno porteño, era casi una revancha después de haber recibido una paliza en las elecciones para comandar la ciudad.
Paredi, hombre de larga trayectoria en la vida interna xeneize, esbozó en alguna oportunidad sus intenciones de presidir la institución a la que pertenece la mitad más uno. Su fanatismo lo llevó incluso a impulsar y producir una película sobre la vida del Titán del gol platense, Martín Palermo.
