El mercado vio que en junio la inflación cedió por segundo mes consecutivo y Sergio Massa tomará el dato como una buena señal para lanzar su precandidatura con mejores expectativas para el próximo 13 de julio, cuando el INDEC dé a conocer el Índice de Precios al Consumidor (IPC) oficial. El Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que realiza el Banco Central previó este viernes que en el sexto mes del año el aumento fue del 7,3%, cinco décimas por debajo de mayo, y en los últimos 12 meses marcó un 142,4%.
Con estos datos, comienza a confirmarse un sendero inflacionario a la baja al que el ministro de Economía y aspirante presidencial puede subirse camino a las elecciones primarias. Narrativa que, de todas maneras, se construye sobre cifras de alta nominalidad. Al igual que el mes pasado, el BCRA hizo la salvedad de que una "nueva información" sugiere que la estadística será más baja y que incluso podría estar en 6,5%. "Indicadores de alta frecuencia de precios mayoristas y minoristas monitoreados por el BCRA, como el IPC de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires" prevén una reducción mensual menor a la del análisis del REM, explicó en una nota aparte la autoridad monetaria.
En la City porteña, los privados habían anticipado para mayo un nuevo piso del 9%. El IPCBA en ese entonces marcó una desaceleración de 0,3 puntos básicos y ahora en el sexto mes del año volvió ubicarse por debajo del pronóstico anterior en 7,1%, es decir, un retroceso de 0,4 puntos porcentuales. La aclaración no fue menor: en meses anteriores, el REM resultó estar varias décimas abajo que lo que finalmente reflejó el IPC oficial. Un dato más cercano a las dos cifras hubiera disparado las alarmas en un contexto sensible en el ámbito cambiario por la previa electoral en plena expectativa devaluatoria.
Las consultoras corrigieron sus proyecciones para todo el año a la baja, lo que da una señal de mejora de cara a los comicios y sus eventuales resultados y corta la tendencia alcista que venía performando en todo el año. Con cambio de gobierno o continuidad del oficialismo, el comportamiento de los precios estará atado en gran parte a lo que suceda con el dólar blue y las divisas bursátiles. En términos de estacionalidad, junio suele ser un mes bajo y tal como adelantó Letra P, en el mercado midieron que los productos de consumo masivo, indumentaria o educación, moderaron sus alzas.
Esto se debe a que rubros como Alimentos y Bebidas, que suele tener mayor incidencia en el promedio general, está regulado por los topes de aumentos de Precios Justos, al igual que artículos de higiene y limpieza. Lo mismo sucede con las tarifas de luz y gas, que ya tuvieron su incremento en mayo. El resto, lo que mide la inflación núcleo, es una de las razones que mantiene las cifras altas pese a la desaceleración, ya que es el componente más inercial del IPC. Para 2023, el REM previó una desaceleración de esa cifra al 141,0% interanual. El impacto rezagado de la corrida cambiaria de la última semana de abril parece haber quedado atrás en un período en el que las monedas paralelas no dieron grandes saltos y, por lo tanto, no generaron actitudes especulativas tanto en operadores financieros como en comerciantes y proveedores, entre otros actores de la economía.
Quienes participaron de esta edición, también calcularon un crecimiento del Producto Bruto Interno (PIB) de 3% menos que 2022 para este año. Para 2024, el conjunto de quienes participan del REM estiman una nueva contracción anual promedio de 0,6%.
Analistas también pronosticaron el tipo de cambio nominal promedio de $267,07 por dólar para julio de 2023 (7,4% de variación mensual esperada) y quienes previeron con mayor precisión esta variable en el corto plazo proyectaron que el dólar oficial para el mismo período se ubicará en $267,20/US$ (7,4% mensual de variación respecto del dato de junio). Es decir, que la devaluación esperada va en línea con la estrategia diaria del Central de convalidar microaumentos por día para sostener el tipo de cambio.
El REM de junio le da a Massa un pase para arrancar virtualmente su campaña hacia la presidencia por el oficialismo rebautizado como Unión por la Patria. El 9 de julio podrá inaugurar el Gasoducto Néstor Kirchner con dos noticias que alientan a pensar en un IPC de junio más bajo y así, confirmar el sendero de inflación a la baja sobre el que pensó su gestión y ahora motoriza su acción proselitista. "Líder protectivo", lo llaman en su entorno, y lo entronizan como quien evitó y evitará una hiperinflación "manteniendo la actividad económica con crecimiento".