El peronismo de la Cuarta sección electoral -bastión del voto agropecuario- se muestra optimista con los resultados que pueda lograr en las PASO del 13 de agosto. Asegura tener buenos números en las encuestas y ve posible retener las seis bancas de Diputados que consiguió en 2019, cuando el Frente de Todos (FdT) estaba en alza y el peronismo volvió al poder central. El desafío incluye, además, triunfar en tres distritos gobernados por Juntos a caballo de dirigentes massistas: Chacabuco, Rivadavia y Bragado. El gobernador Axel Kicillof aporta lo suyo y este miércoles fue a la región para empujar a la dirigencia de Unión por la Patria en dos distritos clave.
“No tenemos malos números... nos está llamando la atención", se sincera ante Letra P un dirigente de la región que trabaja en la campaña. Cree que "el peronismo va a hacer una muy buena elección" debido, fundamentalmente, a dos cuestiones: hay una campaña local muy fuerte y se pusieron a "los mejores" en cancha. ¿Qué sería una muy buena elección para el peronismo? “Sería meter seis de los catorce diputados. Retener lo que tenemos está muy bien, firmamos eso", responde la fuente y se entusiasma con hacer "una excelente elección, que sería quedarse con siete bancas", para lo cual "debería seguir desinflándose Milei”.
El primer lugar en la lista seccional de UP fue para un peso pesado de la región: Avelino Zurro, funcionario municipal y sobrino del intendente de Pehuajó utra K Pablo Zurro; el segundo, para la diputada Viviana Guzzo, mano derecha de la ministra de Gobierno, Cristina Álvarez Rodríguez; el tercero, para el ex ministro de Transporte massista y por quince años intendente de General Pinto, Alexis Guerrera.
La campaña, sin embargo, no es seccional. La estrategia es llevar adelante 19 campañas locales, una por cada distrito de la sección. “En el interior, el que te tracciona es el candidato local, así que la estrategia es que cada uno atienda fuertemente su distrito”, cuenta a este medio otra dirigente de la región y destaca que el peronismo tiene buenas precandidaturas en distritos que no gobierna, además de las postulaciones de quienes buscan la reelección.
El peronismo apuesta, también, a arrebatarle el gobierno municipal a Juntos en tres distritos. El principal es Chacabuco, tercero en la sección en cantidad de electores. Allí, el candidato mejor posicionado (hay dos listas de UP) es el massista Darío Golía, exintendente, quien en 2021 perdió contra el candidato de Juntos por apenas veinte votos. “Está liderando las encuestas”, afirman en el distrito.
Golía recibió este miércoles el apoyo de Kicillof, quien visitó el distrito para entregar escrituras y recorrer un centro de atención primaria de salud y las obras en el Club Rivadavia. El gobernador estuvo luego en Junín, el municipio más populoso de la región, donde encabezó una charla en la Universidad Nacional del Noroeste de la Provincia de Buenos Aires. La apuesta de UP en ese bastión del PRO que gobierna Pablo Petrecca también la lidera una dirigente massita, la diputada Valeria Arata. El podio de tres en cantidad de electores lo completa Chivilcoy, donde la candidata es la diputada Constanza Alonso.
Los otros dos distritos, además de Chacabuco, donde el peronismo se tiene confianza, son Rivadavia y Bragado. En el primero, la apuesta es el senador provincial massista Juanci Martínez; en el segundo UP tiene una interna de cuatro candidatos, pero la pelea se definirá entre dos: el massista Jorge Fernández y el dirigente del PJ Sergio Barenghi. El que gane, afirman en UP, tiene chances de lograr un triunfo en la elección general.