El intendente de Malvinas Argentinas, Leonardo Nardini, es, por estas horas, el nombre elegido por el cristinismo para encabezar la lista de postulantes al Senado de Fuerza Patria en la Primera sección electoral. Su elección no es casual: representa al sector más duro que enfrenta Axel Kicillof; fue uno de los tres funcionarios con los que La Cámpora intervino el gobierno bonaerense en 2021, tras la derrota electoral en las PASO.
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En aquel momento, la conducción kirchnerista exigió cambios en el Ejecutivo. Kicillof desplazó a Agustín Simone del Ministerio de Infraestructura, para ubicar en su lugar a Nardini, entonces intendente de Malvinas Argentinas. También movió a Carlos Bianco de la Jefatura de Gabinete, quien fue reemplazado por Martín Insaurralde, en una jugada que consolidó la presencia del cristinismo puro en áreas clave de la gestión.
Con la intención de sacudir la caja de obras en Buenos Aires y la promesa de poner en marcha una gestión que catalogaba como paralizada en el gigantesco ministerio, a los pocos días de asumir Nardini metió mano: cambió tres de los seis subsecretarios que tenía el área; a Obras Públicas llegó Diego Benítez, quien se desempeñaba en la misma cartera en el municipio de Escobar, distrito gobernado -antes y ahora- por Ariel Sujarchuk; en Técnica, Administrativa y Legal desembarcó Juan José Llaser, quien había sido secretario de Hacienda de Nardini en el distrito de la Primera sección desde el comienzo de la gestión; Planificación y Evaluación de Infraestructura quedó en manos de Norberto Iglesias, asesor del senador Luis Vivona y exfuncionario de Malvinas Argentinas, Zárate y Escobar. Además, incorporó a la dirección provincial de Vialidad al por entonces jefe comunal de Punta Indio, Hernán Y Zurieta.
Con todo, su gestión en Infraestructura nunca terminó de despegar y tras la creciente crítica de intendentes, quienes se quejaban por falta y paralización de obras, apuntó sus cañones nuevamente a la intendencia de Malvinas Argentinas, donde en 2023 lograría la reelección. Dejó el cargo en diciembre y lo sucedió Gabriel Katopodis, el hombre que el Movimiento Derecho al Futuro (MDF) pone sobre la mesa para la lista de la Segunda.
Además de Nardini y Katopodis, completa la terna de postulantes el intendente de San Fernando, Juan Andreotti. Cada uno representa un sector del oficialismo: Katopodis es impulsado por el kicillofismo; Nardini por el sector que responde a CFK y Andreotti, por el massismo.
El intendente de Malvinas cuenta con el respaldo de Máximo Kirchner y la estructura de La Cámpora. Le suma su rol dentro de la junta electoral de Fuerza Patria, junto a Bianco y el massista Rubén Eslaiman.
La Primera, ubicada en el conurbano norte, es la sección más populosa de las ocho en que está dividida la provincia: concentra más de 4,7 millones de electores y en septiembre renovará ocho bancas del Senado bonaerense, cuatro de las cuales están en manos del peronismo. Entre quienes finalizan su mandato están Luis Vivona y Teresa García, ambos cristinistas, quienes no pueden presentarse a otra reelección.
Las definiciones, cerca del cierre de listas
La interna sigue abierta y se encamina a definirse no antes del 19 de julio, cuando venza el plazo para oficializar candidaturas. Mientras tanto, los distintos sectores del peronismo presionan para ubicar nombres propios en lugares expectantes de la lista. Aunque también se menciona al intendente de Pilar, Federico Achával, como posible figura de consenso, en el campamento de Fuerza Patria creen que la pulseada se resolverá entre los tres ya mencionados.