Con una recorrida por el conurbano que incluyó fotos y señales políticas, visitas a fábricas y la reaparición de algunos laderos de la vieja guardia, Daniel Scioli puso este lunes primera en su campaña por territorio bonaerense, donde espera cosechar respaldo de intendentes a su precandidatura presidencial con la mira en la PASO del Frente de Todos. En 24 horas habrá pisado tres distritos.
En el principal bastión electoral del peronismo, el sur del Gran Buenos Aires, Scioli se mostró junto a Fernando Gray, intendente de Esteban Echeverría, el más crítico de todos los alcaldes de la Tercera sección a La Cámpora y su líder, Máximo Kirchner, a quien acusa de haber llegado irregularmente a la presidencia del PJ bonaerense. Después de su paso por ese distrito, fue a Almirante Brown, donde se sacó una foto junto a Mariano Cascallares, intendente en licencia. Este martes, en tanto, irá a Ezeiza, donde se verá con Gastón Granados.
Primero en anotarse como precandidato en el Frente de Todos, Scioli activó el modo campaña. La semana pasada recorrió la Fiesta de la Vendimia, donde se sacó fotos con figuras de ambos lados de la grieta, como Patricia Bullrich y Victoria Tolosa Paz. El domingo participó de las actividades en Luján por la celebración de la década del papado de Francisco, sentado a metros de Alberto Fernández y Eduardo De Pedro. Y en el arranque de la semana desembarcó en el conurbano, donde intenta alinear intendentes detrás de su proyecto presidencial.
En Esteban Echeverría, Scioli estuvo en la empresa Teves, que fabrica alfombras, insonorizantes y bandejas traseras para vehículos, y a la que empuja desde la embajada para que pueda colocar sus productos en Brasil. “Es un placer encontrarme con mi gran amigo Fernando Gray, con quien compartimos grandes momentos. Es muy importante que sigamos ayudando al desarrollo productivo y a la creación de puestos de trabajo genuino”, dijo ahí. Según trascendió, fue el propio Scioli el que coordinó la visita a la fábrica el domingo por la noche y se ocupó de llamar por teléfono al alcalde para pedirle que lo acompañe.
La foto con Gray mandó un mensaje político que no pasó desapercibido a nadie en el universo del peronismo bonaerense: El alcalde juega con autonomía después de haber roto con Máximo Kirchner y con Axel Kicillof, además de acusar a la provincia de discriminarlo con obras. Hay quienes lo mencionan como un posible candidato a gobernador del peronismo federal, bajo el amparo de Juan Schiaretti, con la idea de complicarle la elección a Kicillof.
Con ese encuentro, Scioli también aprovecha para enviar señales de autonomía política del kirchnerismo duro en esta nueva carrera presidencial, una forma de marcar un contraste con respecto a su candidatura de 2015. "Todo el que quiere mandar una señal política viene acá y se saca una foto con el intendente", ensayan cerca de Gray.
En Almirante Brown, el embajador recorrió el Parque Industrial de Burzaco junto a Cascallares, una de las piezas más cercanas al jefe de Gabinete provincial, Martín Insaurralde, alineado a su vez con Kirchner. Sciolismo explícito, haciendo uso de su equilibrismo característico.
En este arranque de la campaña bonaerense, la principal novedad parece ser la reaparición de muchos viejos laderos de la Ola Naranja, que desde hace pocas semanas reactivó su maquinaria electoral, con la búsqueda de avales como principal objetivo. En Esteban Echeverría y Almirante Brown estuvieron, entre otros, su ex ministro de Producción Martín Ferré, actualmente director del Banco Nación.
Se mostraron juntos en una feria de la economía popular en Plaza de Mayo. "Seremos titulares o suplentes", dijo la ministra de Desarrollo Social
En cuatro minutos, historia, pensamiento, fortalezas y debilidades del precandidato peronista.