JUNTOS EN EL BARRO

Clamor por lista única en Buenos Aires frente a la tozudez de Horacio Rodríguez Larreta

Un grupo de dirigentes exige un solo candidato "para no perder" en la provincia. Fugas en puerta. Santilli, el mejor posicionado.

Una fuerte discusión, gritos incluidos, entre Horacio Rodríguez Larreta y dirigentes de su círculo chico ejemplifica la intransigencia del jefe de Gobierno de la Ciudad a aceptar una candidatura única a la gobernación de la provincia de Buenos Aires, lo que significaría compartir su candidato en la madre de todas las batallas. Ni los avisos sobre fugas de intendentes hacia el sector de Patricia Bullrich, como la del bahiense Héctor Gay, ni las advertencias sobre una derrota ante el oficialismo lo hacen cambiar de parecer. Como sea, un amplio sector del intendentismo y de la tropa territorial que no gobierna puso en marcha el operativo clamor para posicionar a Diego Santilli como el postulante de síntesis del PRO.

El pedido de implentar la estrategia de la “Y” –que no haya interna en los distritos que gobiernan ni en el tramo gobernación– lleva meses, pero se aceleró luego del anuncio de Larreta y Bullrich sobre el acuerdo para que cada cual tenga su propio postulante para enfrentar a Axel Kicillof. Todo, sin consultar a las bases territoriales.

Si bien fuentes al tanto del debate reconocieron que no está en el perfil del alcalde porteño discutir su estrategia electoral, alguien recordó ante este medio una fuerte discusión en las horas previas a la reunión que tuvo con la mesa provincial del PRO, lo que dejó al descubierto la crisis y expuso la postura del alcalde de no compartir a su alfil, quien mejor mide en las encuestas.

Dos intendentes, algunos legisladores y armadores del larretismo en la provincia indicaron a Letra P que la mejor estrategia para evitar fugas al team halcón o al espacio del libertario Javier Milei es acordar un único candidato, que les garantice cierto orden en el territorio y despeje el temor de quedar terceros y cuartos en las primarias. “Necesitamos ganar la provincia para ganar a nivel nacional y para eso no hay dudas de que no podemos dividir el voto en dos boletas. Tenemos que estar todos detrás de Santilli”, resumió a este medio un conocedor de los armados y habitual comensal de las mesas santillistas.

La difiicultad de llegar a las PASO con una sola candidatura está atada a la creencia de Larreta de que Santilli es su mejor apuesta para ganarle a Bullrich la interna, atento a que la exministra no cuenta con un candidato tan relevante para disputar este territorio, al menos, según marcan las encuestas de intención de voto e instalación de imagen. Quizá por eso Bullrich aún no decidió qué candidato tendrá en el territorio bonaerense, pese a que en su equipo aseguran que lo definirá antes del 25 de mayo, instancia en la que también podría conocerse el nombre del radical con el que compartirá fórmula.

https://twitter.com/PatoBullrich/status/1658901942712639489

De momento, el mejor posicionado para encabezar la nómina bonaerense del ala dura es el intendente de Lanús, Néstor Grindetti. Las razones son múltiples: tiene línea directa y una relación de cuatro décadas con Mauricio Macri; ostenta una novedosa amalgama política que une su ADN 100% PRO con sus vínculos más allá del partido, que llegan incluso al peronismo no kirchnerista y al vecinalismo; puede mostrarse como buen gestionador y “ganó visibilidad” con su presidencia interina en el club Independiente.

Aun así, el nombre de Cristian Ritondo -con quien Grindetti también comparte amistad y la pasión futbolera por El Rojo de Avellaneda, donde desembarcaron en tándem para correr al clan Moyano- es también un posible candidato de Bullrich, sobre todo después del acuerdo electoral que comenzaron a armar a fines del año pasado y sellaron este mes tras la declinación a la candidatura presidencial de María Eugenia Vidal.

Algunos le ponen nombre a la tozudez de Larreta: Federico Di Benedetto, uno de sus estrategas electorales y secretario de Comunicación en la Ciudad. Sin embargo, no es la única falencia en el ecosistema de Uspallata que es señalada desde adentro de PRO. Una voz con peso propio en el larretismo recordó que el jefe de Gobierno porteño debió enviar a Santilli a negociar por fuera de la provincia de Buenos Aires porque su mesa chica tiene un déficit de operadores. Fue a instancias de un almuerzo que organizó El Colorado en su oficina de Olazábal para intentar cerrar un acuerdo con el gobernador correntino Gustavo Valdés hace algunas semanas.

A poco más de un mes de la fecha límite para la presentación de listas de precandidatos y precandidatas ante la Justicia Electoral, el escenario sigue siendo de “V” –competencia por la presidencia, competencia por la gobernación, síntesis en los municipios que gobiernan– y los dos candidatos a la presidencia del PRO se preparan para disputar la interna en la madre de todas las batallas. Por ahora, todo indica que los únicos en evitar dispustas son buena parte de los jefes comunales del partido amarillo.

Cristian Ritondo y Patricia Bullrich, en Mar del Plata. 
Horacio Rodríguez Larreta y Diego Santilli.

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