LA PLATA (Corresponsalía Buenos Aires) El líder del gremio de curtidores y ariete del kirchnerismo en la pulseada por el control de la CGT Walter Correa se convirtió este miércoles en el primer dirigente sindical en ocupar el cargo de ministro de Trabajo de la provincia de Buenos Aires. El gobernador Axel Kicillof le tomó juramento en un acto que tuvo representantes de las tres centrales sindicales y un pedido común para salir a la calle a “defender a Cristina”.
Correa asumió en reemplazo de Mara Ruiz Malec, una de las ministras del círculo cercano del gobernador, que de esa manera pierde una pieza más en el gabinete. El sindicalista juró “por Eva y Juan Perón, por Néstor y Cristina Kirchner, los 30 mil desaparecidos, los mártires del movimiento obrero” y planteó que su gestión buscará “apuntalar un modelo productivo y defender derechos”.
En los hechos, su llegada al gabinete de Kicillof se lee como un movimiento del kirchnerismo en el marco de la pulseada por el control de la CGT.
El titular del gremio de curtidores integra la Corriente Federal de los Trabajadores junto a Pablo Moyano, Sergio Palazzo y Omar Plaini, entre otros, que pulsea puertas adentro de la central obrera con el grupo denominado Los Gordos que integran Héctor Daer y Carlos Acuña, cercanos a Alberto Fernández y al ministro de Trabajo Claudio Moroni.
El acto de asunción tuvo la impronta del movimiento sindical. En los alrededores y accesos del teatro, los controles estuvieron a cargo de Curtidores y otros gremios afines, como el de Custodios.
En la lista de invitados estuvieron la vicegobernadora Verónica Magario; integrante del gabinete minsterial bonaerense, la intendenta Mayra Mendoza y los intendentes Mario Secco y Federico Achaval, el exintendente Gustavo Menéndez y dirigentes sindicales como Moyano, Hugo Yasky, Abel Furlan, Naldo Brunelli, Vanesa Siley, Daniel Catalano, Roberto Baradel, Omar Plaini, Oscar de Isasi y Mario Manrique.
