LA PLATA (Corresponsalía Buenos Aires) Walter Correa es considerado un duro en el mundo del sindicalismo y reporta directamente a la vicepresidenta Cristina Fernández y a su hijo Máximo Kirchner, de quienes se ganó la confianza luego de acompañarlos desde la mesa sindical de Unidad Ciudadana, en la campaña de 2017. Con 38 años de trayectoria, conduce el Sindicato de Obreros Curtidores de la República Argentina y será, desde el lunes, el nuevo ministro de Trabajo de Axel Kicillof en la provincia de Buenos Aires, en reemplazo de Mara Ruiz Malec, que se muda a la Agencia Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
“Es un dirigente combativo, un hombre de los duros, con un perfil que no es el de los negociadores, muy leal y de convicciones claras”, describió a Letra P un hombre que conoce hace más de tres décadas al ministro de Trabajo designado.
Correa se acercó al kirchnerismo como dirigente de la Juventud Sindical cerca del año 2011, bajo el ala del dirigente de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) Antonio Caló. Desde entonces y a diferencia de otros, destacan quienes lo conocen, siempre se quedó en el mismo lugar. El vínculo con la vicepresidenta y su hijo comenzó a aceitarse años después, durante la campaña de 2017, cuando junto a la secretaria general de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Judiciales de la República Argentina, Vanesa Siley, el secretario adjunto de Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop), Hernán Escudero, y el secretario regional de la UOM Quilmes, Berazategui, Varela, Adrián Pérez, fundó la Mesa Sindical de Unidad Ciudadana, espacio por el que luego Siley y Correa llegaron al Congreso.
“Ese vínculo con Cristina y Máximo se fue afianzando y con el tiempo se construyó una relación de mucha confianza”, cuenta a este medio un líder sindical que lo conoce de toda la vida. Efectivamente, en el último tiempo, Correa se mostró en reiteradas ocasiones cerca de la vicepresidenta y del titular del PJ bonaerense. Fue, por ejemplo, uno de los cuatro sindicalistas que se reunieron con CFK en el Senado semanas atrás. Los otros fueron Pablo Moyano (Camioneros), Omar Plaini (Canillitas) y Mario Manrique (SMATA).
Los encuentros con Máximo Kirchner son recurrentes. En el cónclave de la rama sindical del PJ realizado en Baradero, Correa fue el dirigente que estuvo reunido en privado con el diputado durante más de una hora en la previa al acto, y antes se habían mostrado juntos en diversas ocasiones, como en la asunción del nuevo secretario de la UOM Quilmes, Berazategui y Florencio Varela que desplazó al histórico dirigente y exintendente Barba Gutiérrez; y en un acto de la CGT regional Oeste, que Correa dirige, en Merlo.
El alineamiento de Corral con el kirchnerismo es total. Fue uno de los dirigentes que se subió al operativo clamor por CFK 2023 lanzado Carlos Bianco –“Mi candidata a la presidencia es Cristina”, dijo en una entrevista con Letra P el jefe de Asesores y hombre confianza del gobernador-. El ministro de Trabajo designado manifestó “como militante peronista” su deseo de que CFK sea la próxima candidata a presidenta del Frente de Todos. “Me conduce Cristina”, dice sin miramientos y se autodefine perteneciente al sector “no moderado” del FdT. Es, además, uno de los críticos de la gestión de Alberto Fernández. Antes de que se pusiera en marcha la Fase M con Sergio Massa a la cabeza, en tiempos de fuego a discreción entres las tribus todistas, Correa le reclamaba al Presidente “más peronismo explícito”.
“El peronismo es revolucionario o no es nada. Queremos que se profundicen un montón de cuestiones. Yo, como peronista, el año que viene quiero ganar. Por eso, reclamo lo que reclamo, tanto yo como un colectivo de compañeros”, dijo en aquel momento en un acto que compartía con Kirchner.
Además de secretario general del Sindicato de Obreros Curtidores desde 2012, Correa ocupa el mismo cargo en la Federación del Cuero (FATICA) y es un referente de la Corriente Federal Trabajadores.
Oriundo del distrito de Moreno, en 2013 fue electo concejal en la lista del Frente para la Victoria. En las elecciones legislativas de 2017, fue electo diputado nacional por la provincia de Buenos Aires; ocupó el décimo lugar en la tira de postulantes de Unidad Ciudadana. En 2019 fue precandidato a intendente del distrito, donde compitió con la intendenta Mariel Fernández, la dirigente del Movimiento Evita con quien mantiene buen vínculo. Tal es así que es vicepresidente del PJ local que preside la jefa comunal. Además, Correa preside el Ateneo Néstor Kirchner en ese distrito.