FASE M

Operativo de pinzas sobre el Presidente para sacudir el gabinete

Hubo reunión improvisada entre Fernández y la Liga de las provincias. Pedido de cambios y medidas. Clamor por Massa superministro en Economía.

Con una seguidilla de declaraciones, reuniones y movimientos coordinados, el peronismo metió presión sobre la Casa Rosada para que el presidente Alberto Fernández defina en las próximas horas cambios contundentes en el Gabinete y anuncie medidas concretas para enfrentar la crisis económica y cambiaria.

 

“El Presidente transmitió que está trabajando para tomar las medidas pertinentes”, fue el escueto mensaje que acordaron dar los 12 gobernadores y la gobernadora Alicia Kirchner, tras reunirse durante dos horas con Fernández en la Casa Rosada, de donde se retiraron sin hacer declaraciones. El Gobierno se limitó a remitir a la versión de las provincias.

 

 

El clima fue tenso durante toda la jornada. Desde hace semanas, las provincias vienen presionando para que la cúpula del Frente de Todos (FdT) encauce la situación política. Los reclamos comenzaron en marzo, por la falta de diálogo entre el Presidente y Cristina Fernández de Kirchner. Ya con el vínculo restablecido, en las últimas semanas se sumó la tensión cambiaria, que derivó en un agravamiento de la crisis económica.

 

En sintonía con Cristina Kirchner y con Sergio Massa, las provincias empezaron a insistir para que el Presidente defina cambios en el gabinete que puedan interpretarse como un golpe de timón, un paquete de medidas económicas y un lugar en la mesa de decisiones. Exigen definiciones claras: ese fue el mensaje que llevaron este miércoles a Balcarce 50. En ese contexto se reeditaron las versiones sobre la eventual llegada de Massa al Gobierno.

 

Los rumores ubicaron al líder del Frente Renovador inicialmente en la Jefatura de Gabinete, pero en las últimas horas comenzó a sonar más fuerte la posibilidad de que desembarque finalmente como coordinador del área económica o jefe de un súper ministerio. La idea incluye la permanencia de la recién nombrada ministra de Economía, Silvina Batakis, que volverá este jueves desde Estados Unidos, donde se reunió con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial, inversores y analistas de Wall Street.

 

La llegada de Massa fue impulsada por una suerte de operativo clamor, que atravesó a distintos sectores del FdT. Este miércoles, mientras la liga de las provincias rodeaba al Presidente en el salón Eva Perón, llegó el pedido de incorporación del jefe del Frente Renovador desde el corazón del gobierno de Axel Kicillof. “Su visión y su experiencia vendrían muy bien en esta etapa para encauzar la reconstrucción”, dijo el jefe de Gabinete bonaerense, Martín Insaurralde.

 

Las declaraciones de Insaurralde fueron repartidas por fuentes ligadas al Instituto Patria, que apuran las definiciones del Presidente. Fernández, dicen en el cristinismo, se había comprometido a encarar una reestructuración de Gobierno en la charla que mantuvo con la vicepresidenta la noche del domingo 3 de julio, cuando se definió el nombramiento de Batakis. Pero el mandatario postergó las definiciones. Algo que altera los nervios de la dirigencia del FdT, que entiende que la elección está a la vuelta de la esquina y no hay más tiempo que perder. 

 

Dos días después de esa conversación, fue el diputado Leandro Santoro, hombre de confianza del Presidente, el primero en decir públicamente que le “gustaría que Massa se sumara al gabinete”. En la misma línea habló en las últimas horas la platense Victoria Tolosa Paz, que responde directamente a Fernández. 

 

"Es momento para cambiar el gabinete y proponer otros jugadores. Creo que Massa es un buen jugador en estos momentos en los que tenés que dar señales al mercado, pero contener hacia adentro; lograr amalgamar a los sectores del Frente de Todos que están reclamando", dijo Tolosa Paz. Lo mismo había dicho el secretario general de la CTA y diputado fiel a Cristina, Hugo Yasky. Las voces se fueron sumando y seguirán presionando hasta que Fernández ejecute los cambios prometidos. Algo que se concretaría antes del lunes. 

 

Además de la eventual llegada de Massa, también se instaló en las últimas horas la versión sobre el posible desembarco de Jorge Capitanich, supuestamente impulsado por Cristina Kirchner para ocupar la Jefatura de Gabinete. Fue el último de los mandatarios en llegar a la Casa Rosada para sumarse al encuentro con el Presidente y también el último en irse, a las 18, una hora más tarde que el resto de sus pares. El chaqueño lleva la voz cantante del reclamo de las provincias para que el jefe de Estado les habilite un lugar en la mesa de decisiones del Gobierno.

 

Victoria Villarruel. 
Juan Manuel Llamosas, Martín Llaryora y Guillermo de Rivas en la última visita del gobernador a Río Cuarto.

También te puede interesar