APOYO PERONISTA. En medio de la interna amarilla por las candidaturas a gobernador de Buenos Aires, el diputado Diego Santilli, alfil de Horacio Rodríguez Larreta, recibió el respaldo del exsenador Miguel Ángel Pichetto. “Desde Encuentro Republicano Federal, vamos a acompañar a Santilli para producir el cambio que necesita la provincia”, dijo el compañero de fórmula de Mauricio Macri en 2019 durante un acto de campaña del legislador en Avellaneda, donde ofició de anfitrión Maximiliano Gallucci, titular del bloque de Juntos en el Concejo Deliberante de ese distrito.
Así, el armado de El Colorado, quien estuvo acompañado de Agustín Forchieri, gana un apoyo clave en su pelea mano a mano con Cristian Ritondo, delegado de María Eugenia Vidal en el territorio del 37% del padrón nacional y representante del team halcón que encabeza Patricia Bullrich, con quien comenzó a tender puentes. Con Pichetto, Santilli suma peronismo.
ES LA SEGURIDAD. Antes de llegar a la primera parada del tour, Santilli tomaba nota del estado de las calles del distrito, la cantidad de locales cerrados y la presencia de efectivos de seguridad en las calles. La seguridad es uno de los pilares de su campaña, un tema que maneja desde su paso por esa cartera en la Ciudad de Buenos Aires. “Es mi materia”, repite el exfuncionario del alcalde porteño.
Ya en destino, advirtió que justo enfrente del lugar donde iba a reunirse con su militancia había un local partidario del ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat e intendente en uso de licencia de Avellaneda, Jorge Ferraresi. La casualidad representó una anécdota graciosa para su equipo hasta el momento en que una camioneta del Municipio comenzó a bajar vallas de madera y varios de los presentes pensaron que se trataba de un mensaje.
RECUERDOS DE CAMPAÑA. Entre picada, sánguches y empanadas, Pichetto desplegó todo su arsenal contra la diputada Vidal: la acusó de no hacer lo suficiente en las elecciones de 2019. “Hay que dejarse de joder con los escenarios 360°”, bramó. “Tuve que recorrer en soledad la Provincia”, dijo en relación a la campaña presidencial en la que, según él, “faltaron 100 fiscales por escuela”.
Mientras todo esto sucedía, Santilli evitó cualquier tipo de referencia al pasado electoral de JxC, arengó a la tropa pichettista y pronosticó una victoria hasta en La Matanza, el gigante del conurbano donde manda el peronismo. Ya de nuevo en el auto, camino a Florencio Varela, comenzaba a hacer foco en dos mapas que están en la sala de reuniones que utiliza en su oficina. El primero tiene pintados de amarillo y celeste los municipios que ganó JxC y el Frente de Todos (FdT), respectivamente; el segundo, cada una de las rutas por donde pasa prácticamente toda la producción bonaerense.
PLANES PARA EL DÍA DESPUÉS. Santilli guarda bajo siete llaves un mapeo de Buenos Aires. Ese documento es uno de los pilares de los planes de gobierno que ya prepara. Mientras se acercaba a Florencio Varela, en donde tendría una serie de actividades con el candidato a jefe comunal Pablo Alaniz y el intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela, habló con su equipo de la necesidad de alejarse lo más posible de los temas de la rosca política.
“La sociedad no quiere hablar de las PASO, de sí se eliminan, si se mantienen… Lo que le importa es la inflación, la seguridad, poder mandar los chicos al colegio y conseguir trabajo”, sostuvo. Ya en Florencio Varela, le pidió al conductor del auto que se detuviera porque le resultaba más rápido caminar unas cuadras de tierra. Era una forma de ganar tiempo y tomar la temperatura de la calle.
Rápido de reflejos, Santilli supo manejar durante su recorrida un momento incómodo. Fue cuando un militante del movimiento “Libres del Sur” criticó su presencia aduciendo que los políticos solo van al lugar cuando están en campaña. El candidato se acercó a escuchar razones, dialogó con la persona y prometió volver.
CERCANÍA CON EL ELECTORADO. Santilli disfruta el nivel de conocimiento que tiene en el electorado bonaerense, pese a haber hecho parte de su carrera en la Ciudad. En su entorno dicen que se debe a la exposición que tuvo durante la pandemia del Covid-19. “Eso le dio una visibilidad que se consolidó durante la campaña”, indicaron allegados al diputado.
Tras caminar tres cuadras, llegó a la casa de Marcelo, uno de los vecinos del barrio 3 de mayo del distrito de Florencio Varela que lideró la instalación de un centro de monitoreo casero con cámaras de seguridad. Santilli fue todo oídos. Despojado de todo protocolo, recorrió junto a su anfitrión el tendido de seguridad e intercambió información sobre tipos de cámara y forma de conexión.
El cierre de la jornada fue con una reunión con vecinos. En un café colmado de gente del vecindario, Santilli volvió sobre las bases del discurso que dio frente a los militantes de Pichetto, una arenga electoral en un distrito en el que JxC logró recortarle 20 puntos de diferencia al oficialismo entre 2019 y 2021.
