La Mesa de Enlace olió sangre electoral y fue por la liberación total de las exportaciones. Del otro lado del mostrador se encontró con un Julián Domínguez que recién asumió al Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca y cuenta, al menos en fotos, con el respaldo del Presidente, ministros y gobernadores aliados.
En este tire y afloje, las entidades rurales salieron de la reunión “con gusto a poco”. “No es lo que pretendíamos, pero es un primer paso”, manifestó el presidente de Confederaciones Rurales Argentina (CRA), Jorge Chemes, a Letra P. Cerraron el capítulo de la carne, pero la novela sigue. En esta batalla con el Gobierno, el campo sabe que se anotó unos porotos importantes, pero se quedó con ganas de una mayor tajada.
“Los productores ganaderos nunca van a estar de acuerdo porque quieren libre mercado”, sostuvo Domínguez. De esta manera, la discusión vuelve a ser de fondo y no solo por la vaca de conserva. “Estoy de acuerdo”, dijo Chemes y señaló que el productor quiere libertad porque las intervenciones generan distorsiones.
«No es lo que pretendíamos, pero es un primer paso»
Sin embargo, no todas las entidades de la Mesa de Enlace hicieron el mismo balance del encuentro con Domínguez. Para Coninagro la reunión fue positiva y valoró la presencia de los ministros y gobernadores. “Jerarquizó a la Mesa de Enlace”, comentó el presidente de la entidad, Elbio Laucirica.
Comienzan a reavivarse las diferentes ópticas dentro de la Mesa de Enlace. Para algunos la situación es blanca o negra, mientras otros valoran los grises. Hay otras miradas y no siempre se comparten.
Si en algo coinciden las cuatro entidades es en que Domínguez dio la señal que necesitaban para dejar definitivamente las medidas de protesta en stand-by. Sin embargo, no quieren desbordar optimismo y prefieren la cautela. “No es la primera vez que anuncian algo y no lo cumplen”, señalaron.
Gran parte de la Mesa de Enlace insiste con que las tensiones continúan y aún no se resolvió nada significativo. “Si esto fuese un partido de fútbol, todavía no va ni el primer tiempo”, destacaron en el entorno de una de las entidades, la más combativa.
«Si esto fuese un partido de fútbol, todavía no va ni el primer tiempo»
Ahora, el campo quiere aprovechar el viento favorable para discutir más temas y, si es posible, antes de las elecciones de noviembre. Los dirigentes entienden que estas medidas y el apoyo de los gobernadores, en cierto modo, son consecuencia del resultado electoral. Por su parte, Domínguez dejó en claro que será quien marque la agenda.
La Federación Agraria y la Sociedad Rural también expresaron su sabor amargo por no conseguir la apertura total. “La liberación de la exportación de la vaca de conserva alivia”, mencionó Achetoni, y automáticamente recordó que hay una batería de temas para abordar que no son menos importantes.
Los guiños al campo
El gobierno tendió diversos puentes, uno de ellos la presentación de la ley de exportaciones, que también contempla a la ganadería. “Hay muchas expectativas”, confirmó el referente del Consejo Agroindustrial, Gustavo Idígoras.
Además, destacó que, en los anuncios de la vaca de conserva y la presentación de la ley, ve una energía diferente y necesidad de acción por parte del Gobierno. En este sentido, agregó que se respetó lo pactado en un principio, aunque comentó que el Ejecutivo quitó un punto en el texto de la norma: incentivos por la realización de vivienda rural. La pelota queda en el Congreso.
Otros guiños al campo fueron la eliminación de requisitos para quienes quieran tomar créditos con tasas bonificadas para la producción vacuna y la revisión de frigoríficos que realizaron inversiones y no tuvieron cupos de exportación.