El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, le trasladó este viernes al Jefe de Gabinete nacional, Santiago Cafiero, las inquietudes y pedidos de intendentes bonaerenses del interior para reactivar de manera gradual algunas actividades productivas que permitan mover la economía interna en las pequeñas localidades. En ese marco, según supo Letra P, se definió que, con autorización de la Nación, el Ejecutivo bonaerense someterá “a la voluntad del intendente y de cada comunidad y la comunidad de cada municipio si esa actividad determinada se aprueba o no”. Y, como adelantara este medio, se trata, sobre todo, de construcciones privadas, ventas online de negocios no permitidos hasta el momento y la prestación de oficios profesionales.
Para que esas actividades vuelvan gradualmente a desarrollarse, los intendentes tienen que contar con la seguridad de que en su distrito pueden garantizar los protocolos para el desarrollo de tal actividad. Solo así será habilitada.
Además, la Jefatura de Gabinete definirá las propuestas de los municipios para actividades no permitidas hasta el momento. En otras palabras, Kicillof funcionó de enlace y no podrá decidir.
El caso del conurbano bonaerense es distinto. De hecho, los intendentes ya saben y pidieron que la cuarentena siga. Este viernes, en un móvil de C5N, al mandatario de Hurlingham, el peronista Juan Zabaleta, se le consultó si en su distrito podía pensarse en abrir ciertas actividades: “No”, respondió, tajante. A su lado, asentía su par de Tres de Febrero, el macrista Diego Valenzuela.
"Hay realidades distintas y las estamos atendiendo", expresó Cafiero y diferenció "zonas que están muy abarrotadas, como el conurbano", con una "complejidad distinta a otras más alejadas, incluso dentro de la provincia de Buenos Aires".
En la gestión de Kicillof ponen la atención en la responsabilidad de los intendentes bonaerenses para respetar y garantizar los protocolos en caso de que las actividades se fueran reactivando. “Para que rijan en su municipio tienen que solicitarlo, enviar el protocolo y además comprometerse a controlarlo ellos. Y si alguna de las actividades las rechazan, basta con que lo digan”, le explicaron a Letra P desde el entorno del mandatario.
Hay pedidos muy puntuales de las comunas. Por ejemplo, el intendene de Tigre, Julio Zamora, informó que le solicitó a Kicillof incluir dentro del régimen de excepciones a unas 160 empresas e industrias, en los rubros de construcción, automotriz, plástica y naval. El problema principal en el conurbano que frena el regreso de las actividades por el momento es que implica traslado de personas.