La reconfiguración de la AFA no está exenta de un alto contenido político, empezando por su presidente Claudio Tapia. Empezó como barrendero, fue delegado, asesor del Gobierno de la Ciudad, director, y desde 2015, vicepresidente del CEAMSE, el organismo que trata la basura y requiere acuerdos de los gobiernos porteño y bonaerense. En la primera reunión de alto voltaje entre Mauricio Macri como presidente electo y Hugo Moyano, "Chiqui" acompañó a su suegro. Su relación con el ex presidente históricamente fue buena y en 2017 designó como director ejecutivo de la AFA a Gerardo León, quien para asumir renunció a su cargo como jefe de Gabinete de le Enacom de Cambiemos.
Las seis vicepresidencias que regirán desde el 19 de mayo serán para Boca, River, San Lorenzo, Independiente y dos clubes del ascenso. Jorge Ameal, presidente de Boca, es peronista, aunque dice que “dejaron la política afuera del club”. No tiene la presencia fuerte que tenía Daniel Angelici, alfil político y judicial de Macri, pero tampoco está virgen. Su jefe de campaña y actual vocero es Daniel Ivoskus, ex concejal de San Martín y diputado provincial por Cambiemos hasta 2019. Su vicepresidente tercero es Roberto Digón, ex diputado e histórico sindicalista del tabaco y, dentro de las alianzas internas, recibió los apoyos de las agrupaciones de Enrique “Coti” Nosiglia, operador radical, y Victor Santa María, titular del Suterh.
Rodolfo D´onofrio se incorporó para no quedar afuera y potenciar su nombre para las elecciones de 2021, ya que suena como un activo para el Frente de Todos. Recorrió Hurlingham, donde River tiene un predio, con el intendente Juan Zabaleta, y acompañó al presidente Alberto Fernández cuando presentó reformas en la universidad de ese distrito. Tiene a muchos hombres vinculados al PRO: Ignacio Villarroel, secretario del club, fue abogado y coordinador de campañas en Entre Ríos; debajo suyo está Darío Santilli, hermano de Diego, vicejefe de Gobierno de Buenos Aires. Durante años el tesorero fue Andrés Ballota, a cargo del ente recaudador porteño, reemplazado por Ignacio Amui, gerente del Grupo Werthein, ex compañero de Macri en el Newman y habitué de los partidos de paddle del ex presidente. Algunos de los vocales son Eugenio Burzaco, ex secretario de Seguridad de Nación, Adrián Varela, funcionario de la Legislatura porteña y Valentin Diaz Gilligan, ex subsecretario general de Presidencia, cargo al que renunció en 2018 por una cuenta no declarada en Andorra.
Marcelo Tinelli fue designado por el Presidente dentro de la mesa que coordina el hambre en el país y sucedió en San Lorenzo a Matias Lammens, ministro de Turismo y Deporte y vicepresidente segundo del club. Quien iba a liderar la lista en diciembre era Horacio Arreceygor, que terminó como vicepresidente primero y es titular del Sindicato Argentino de Televisión (SAT). Hasta el año pasado eran parte de la comisión directiva Gabriel Martino, ex presidente de HSBC Argentina, y Joaquín De la Torre, ministro de Gobierno bonaerense durante la gestión de María Eugenia Vidal.
Hugo Moyano, ex jefe de la CGT y a cargo del Sindicato de Choferes de Camiones desde 1987, tiene a dos de sus espadas gremiales en Independiente: su hijo Pablo, vicepresidente primero y secretario general adjunto, y Hector Maldonado, secretario general en Avellaneda y protesorero en el gremio. La vicepresidencia segunda es de Carlos Montaña, subsecretario en el Ministerio de Desarrollo Social de Nación, cargo que ya ocupó en la gestión de Alicia Kirchner. Montaña además fue concejal de Tres Febrero por el PJ.
Entre los vocales se destacan dos secretarios generales: Sergio Palazzo, de La Bancaria, y Ricardo Cirielli, de la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico. Cristian Ritondo, diputado de Cambiemos, fue vocal en el primer mandato, actualmente es miembro de la Asamblea de Representantes, aunque está distanciado de Moyano.
La ausencia de Racing dentro de las vicepresidencias no lo deja en inferioridad. Victor Blanco retuvo la secretaría general de AFA que, con la presidencia y la vicepresidencia primera, son los tres cargos con firma. El secretario general es Christian Devia, funcionario de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, que preside Alejandro Amor, vocal en el primer mandato de Blanco. De los ocho vocales sobresalen el abogado Mariano Cúneo Libarona, Gabriel Astarloa, Procurador General de la Ciudad, y Patricio Rotman, amigo de Horacio Rodriguez Larreta, cuyo cuñado, Roberto Martinez Álvarez, dirige el departamento de prensa. En 2017, el jefe de Gobierno hizo campaña por la reelección del presidente a través de una cuenta de mail personal. Ese mismo año, Blanco le cedió el Cilindro a Cristina Fernandez de Kirchner para que cierre su campaña a senadora.
En la actual composición de AFA está Marcelo Achile, prosecretario y seguramente uno de los seis vicepresidentes. A cargo de Defensores de Belgrano es, además, responsable de Deporte y Juventud de la Defensoría porteña. Uno de vocales es Nicolás Russo, mandamás de Lanús y diputado bonaerense por el Frente de Todos, impulsado por Sergio Massa, uno de los articuladores del fin de la Superliga.
El Tribunal de Disciplina lo preside Fernando Mitjans, que llegó en 1995 de la mano de Macri y está casado con la ministra de Justicia, Marcela Losardo. Su segundo es Sergio Fernández, que preside la Sala III de la Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal, y es hermano de Javier, uno de los auditores generales de la Nación e histórico operador judicial del peronismo. Otro de los miembros es el ex juez federal Jorge Ballestero.
En Apelaciones hay dos jueces de Casación Penal de la Provincia de Buenos Aires: Fernando Mancini, presidente de la Sala II, y Martin Ordoqui, titular de la Sala V, actualmente suspendido y con un jury abierto por presunto cobro de coimas. En el de Ética supo estar Raúl Plee, a cargo de la Fiscalía General N° 2 ante la Cámara Federal de Casación Penal desde 1992.
El esquema presente de la Superliga tiene como tesorero a Digón y como vocales a Mario Leito, presidente de Atlético Tucumán, diputado nacional por el Frente de Todos tucumano y a Augusto Costa, vicepresidente primero de Velez y ministro de Producción bonaerense. Al tribunal de Apelaciones, que dejará de existir, lo lidera el fiscal federal Eduardo Taiano.
Mientras el coronavirus avanza y las restricciones para moverse también, no hay certezas de cuando volverá a jugarse al fútbol. Pero lo que es seguro, con pandemia o no, es que la rosca no para y que la política sigue jugando al ritmo de la pelota.