El peronismo apuesta a que, después del contacto que mantuvieron este martes por la noche el gobernador Omar Perotti y el presidente de la Cámara de Diputados Miguel Lifschitz, el progresismo trate a la brevedad y apruebe la Ley de Necesidad y Urgencia. El socialismo, por su parte, bajó un cambio y pide una serie de garantías para convalidar el proyecto.
Perotti lo llamó a Lifschitz y le pidió la “mayor colaboración” en el tratamiento de la ley. Lo reveló en la conferencia de prensa matutina que impuso a diario en el marco de la pandemia por el coronavirus. Obtuvo “buena instancia de recepción” en la respuesta del socialista, confió ante los periodistas de la capital provincial.
Es un gesto no menor. No es la primera vez que actual y antecesor entran en contacto. Como reveló Letra P, rompieron el hielo al compartir mensajes de WhatApp días atrás. Luego el mandatario convocó a exministros de salud socialistas y en las últimas horas hablaron por teléfono. Aflojaron ambos.
Por ese motivo, en virtud de la emergencia coyuntural, Perotti espera una señal de Lifschitz. “Hay mejor clima”, le admitió a Letra P el ministro de Gobierno Esteban Borgonovo, quien permanece en cuarentena en su casa. El gobernador deslizó que los números son “anécdotas” en función de que se precisará más de una vez la ayuda de la Legislatura a la hora de pedir financiamiento extraordinario. “Vamos a estar juntándonos en el año para evaluaciones adicionales”, avisó el rafaelino.
Antes de la pandemia, el peronismo pretendía endeudarse en 39 mil millones de pesos, pero la oposición radical y socialista lo dejaba estirarse a 22 mil millones de pesos, poco más de la mitad. “Hoy es el momento del acuerdo político, de la dirigencia tirando para el mismo lado”, demandó Borgonovo, quien confía en que la situación se resuelva este jueves. Mantener el monto de 39 mil millones sería, para el ministro, “lo más rápido y práctico”.
Lifschitz le reconoció a Perotti que Diputados trabaja sobre la base del proyecto que tuvo media sanción del Senado y se comprometió a hacer el máximo esfuerzo para conseguir la aprobación del proyecto “cuando sea, lo más rápido posible”.
Pero, como contrapartida, le pidió al gobernador que el Ejecutivo envíe información sobre la situación financiera de la provincia que, según el socialista, se desconoce; y por otro lado, que lo ponga en conocimiento del plan de acción de gobierno en esta coyuntura.
Es objetivo del exgobernador aprobar una iniciativa que tenga los consensos de toda la Cámara, no solo del Frente Progresista. En ese sentido, asoma difícil que dicha instancia vaya a alcanzarse en las próximas pese a que las reuniones de rosca se tornaron frenéticas en las últimas horas.