El economista y ex director del Banco Nación Carlos Melconián afirmó que una “transición del caos es evitable” y que las reservas están justamente para lograr la tranquilidad necesaria para llegar con aire al 10 de diciembre. Además, dijo que el costo político del reperfilamiento de la deuda lo paga Mauricio Macri, pero las soluciones se patean para la próxima administración.
Por estos días, el Gobierno se empeña en atajar las turbulencias financieras sin que las reservas disponibles se diluyan del todo y complique más aún la situación económica. Esto obligó a tomar decisiones sobre el dólar, con restricciones en el mercado cambiario, sobre la deuda con reprogramación de pagos y sobre el funcionamiento de los bancos, para desactivar temores en los ahorristas.
“Que la transición sea serena y termine sin reservas, existe. Que sea serena y termine con reservas, no existe, porque si no uso las reservas no es serena. Justamente, las reservas son para que sean serenas, pero se te terminan”, sostuvo ante unos 800 empresarios invitados por la Federación Gremial de Industria y Comercio de Rosario.
El economista apeló a una figura similar a una fábula para hablar de la transición: “Las reservas son una teta que tienen el número 35.000 millones -no 60.000 millones como dicen- de leche usable y tiene tres terneros que maman. El primero es el pago de la deuda. El segundo es la venta de dólares diarios, los 300 millones diarios. Y el tercer ternero son los depósitos en dólares que se retiran”.
Y continuó con la parábola: “Leche no va a quedar para que sea tranquila la transición. No alcanzará para los tres terneros”. Siguiendo su lógica, ya se eliminó un ternero porque se reperfiló la deuda doméstica. “Al eliminar el ternero de la deuda, a los otros dos terneros les agarra cagazo porque no saben cuál de los dos es el que se va a quedar sin leche”, explicó.
“Y luego llegó el cepo para el ternero de la venta de dólares -amplió-. Y así se salva el tercer ternero que está cerca de vivir. En el fondo, significa que los depósitos en dólares es lo que más protegido está”.
“La transición sale bien si las variables financieras se mantienen en orden: la teta y los terneros. Dos fuera de juego, y el tercero, si los otros dos se tranquilizan, le queda leche. Y por último, el cuarto trimestre de flan con dulce de leche”, dijo. El flan, según el economista, es la posibilidad de emitir y aumentar el déficit fiscal “corriéndote del ajuste del Plan Picapiedra”.
Según Melconian, “las tres deudas van a default, pero lo arregla el gobierno que viene. El costo del reperfilamiento lo pone Macri, la solución el que viene”.