El modelo M

Con Macri, la deuda del Tesoro dio el salto más abrupto desde 1992

Creció un 32% en los dos primeros años de la gestión Cambiemos. Y alcanzó el récord de 335.000 millones de dólares. La tendencia se mantiene en 2018.

La deuda del Tesoro nacional aumentó 32% en términos reales durante los dos primeros años de la gestión de Mauricio Macri en la Casa Rosada y alcanzó el récord de 335.000 millones de dólares.

 

Según datos del Ministerio de Hacienda, entre 1992 y 2001, la deuda pública del Tesoro aumentó en 81.000 millones de dólares al pasar de 63.000 millones a 144.000 millones de dólares.

 

Entre 2001 y 2015, el pasivo se incrementó en 110.000 millones de dólares: de 144.000 millones a 254.000 millones.

 

Y, siempre de acuerdo a datos oficiales, entre 2015 y 2017, el rojo pasó de 254.000 millones a 335.000 millones de dólares, es decir, registró un alza de 81.000 millones en solo dos años.

 

Así, el incremento registrado de la deuda de Tesoro fue del 31,89% en los dos primeros años de la alianza Cambiemos en la administración del Estado nacional.

 

 

Este pasivo siguió aumentando en el primer semestre de 2018 y continuará en esa senda hasta el final del mandato del presidente Macri debido a la estrategia escogida por su gobierno para cubrir el déficit fiscal.

 

Las Letras del Banco Central (LEBAC) son deuda que emite la autoridad monetaria para absorber la emisión de moneda doméstica generada por el muy alto déficit fiscal.

 

El principal objetivo de las LEBAC fue reducir excedentes monetarios que agregarían presiones sobre el nivel de precios y el valor del dólar.

 

 

 

Para tener una idea de órdenes de magnitud, el circulante de moneda nacional en poder del público es de 740.000 millones de pesos, mientras que el stock de LEBAC asciende a 1,25 billón de pesos.

 

Es decir que, si a todos los tenedores de LEBAC se les devolviera el efectivo, el circulante más que se duplicaría, indicó en un análisis el Instituto para el Desarrollo Social Argentino (IDESA).

 

La estrategia acordada por el Gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI) es tender a que sea el Tesoro el que contraiga esta deuda para que el Banco Central tenga mayor autonomía en el control del dólar y la inflación.

 

El proceso se inició con licitaciones de Letras del Tesoro (LETES), con la cual el Ministerio de Hacienda propone al público cambiar sus LEBAC por LETES.

 

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