ENTREVISTA. CAMILA CRESCIMBENI

“Nunca hubo un Gobierno y un espacio político tan abierto a los jóvenes”

La presidenta de la Juventud PRO defiende la gestión de Cambiemos y su rol en el Gobierno. Le preocupa que los jóvenes crean que "el Estado tiene que resolver absolutamente todos los problemas".

Camila Crescimbeni recibe a Letra P en el edificio del Instituto Nacional de Juventud (INJUVE), en el barrio de Belgrano. De 28 años y oriunda de la localidad bonaerense de Almirante Brown, Crescimbeni, con el aval del presidente Mauricio Macriasumió en abril la conducción de la Juventud PRO, tras años de militancia en el partido, un paso por el Ministerio de Educación de la Ciudad y su desembarco en la gestión nacional en 2015.

 

Si bien es la primera integrante de su familia que se sumó a las filas de un partido político, durante la entrevista contará que en su casa siempre se debatió sobre política. Sus padres repiten una anécdota de niña en el patio de su casa: imitaba o recreaba los discursos de Eva Perón. Muchos años después, ingresó al PRO y comenzó a crecer en las filas macristas. En 2015, Cambiemos ganó la elección presidencial y tuvo que optar entre dos caminos: abrazar la oportunidad de estudiar en el exterior o sumarse al Gobierno. Optó por lo segundo, aconsejada por su amigo Pedro “Piter” Robledo, que tuvo mucho que ver con su llegada a la presidencia de los jóvenes macristas.

 

En la actualidad, es directora de Inclusión Joven dentro del INJUVE y dirige la Juventud macrista. Divide su agenda semanal en dos: al tiempo que ejerce en el Gobierno, también integra el Concejo Deliberante de Almirante Brown, al que llegó de la mano de Carlos Regazzoni, ex titular del PAMI y uno de sus referentes dentro del espacio.

 

El promedio de edad dentro de INJUVE no supera los 27 años. Hombres y mujeres circulan por los pasillos del edificio diseñado en forma de “T” que forma parte de la estructura del Ministerio de Desarrollo Social, que conduce Carolina Stanley. Al ingresar, la estética PRO aflora sin intermediación: en el corredor central se exhiben banderines con valores o ideas propias de la cultura organizacional del espacio político, incluso algunos conceptos que Macri repite públicamente. Leyendas como “Futuro”, “Pasión” y “Respeto” decoran las oficinas del Instituto. En otro costado, el cuadro con la imagen de Macri sonriente con la banda presidencial mira hacia el centro de la oficina.

 

A lo largo de la charla, Crescimbeni hará foco en las políticas públicas para los jóvenes sobre las que trabaja el Gobierno, admitirá que la crisis económica golpea al sector joven, pero aclarará que esa situación responde a un “fenómeno global”. Pedirá cambios en los métodos de enseñanza para “adaptarse” a los desafíos que plantea el mercado del trabajo. “La educación y los cambios culturales suceden más lento que lo que cambia el mercado trabajo”, afirmará. “La preparación para los trabajos del futuro está muy presente en cada decisión de política pública”, subraya.

 

BIO. Oriunda de Almirante Brown, tiene 28 años y es licenciada en Ciencias Políticas (UBA). En 2012 comenzó su carrera política en el Ministerio de Educación de la Ciudad, durante la gestión de Mauricio Macri como jefe de Gobierno. En 2015 asumió en la entonces Subsecretaría de Juventud. Dos años después fue candidata a concejal por Almirante Brown y desde abril conduce la Juventud PRO.

 

 

 -¿Qué es el INJUVE y sobre qué áreas trabaja?

 

-Es el Instituto Nacional de Juventud. Se creó en febrero, anteriormente fue la Subsecretaría de Juventud y la Dirección Nacional de Juventud (DINAJU). El objetivo de transformarlo y modificar su nombre es que sea un órgano rector de las políticas públicas de juventud y sea transversal.

 

Es un organismo que define y genera políticas públicas para jóvenes, pero también tenemos el deber y responsabilidad de articular con los otros 130 programas que hay para jóvenes en otros ministerios. Cuando asumimos vimos una cantidad de programas para jóvenes que eran desconocidos. Comprobamos que se conocía el plan Progresar y el resto de los programas no se conocía. Había muchos recursos usados y poca inteligencia en la transmisión de esos recursos.

 

-Según cifras oficiales, la tasa de desempleo joven es 3,7% más alta que la de los adultos. ¿Qué lectura hace de la situación de los jóvenes en el mercado laboral argentino?

 

-Es un tema que el Gobierno viene trabajando desde el 10 de diciembre de 2015. Es el flagelo más grande para los jóvenes a nivel mundial y responde a muchas variables. La automatización y digitalización de los trabajos es un tema, por ejemplo. La educación y los cambios culturales suceden más lento que lo que cambia el mercado trabajo. Hoy seguimos educando en conocimientos académicos, en información y no en mentalidad crítica o en el desarrollo de creatividad. Como dice Esteban Bullrich (ex ministro de Educación), tenemos que educar jóvenes que creen trabajo y no que busquen trabajo.

 

Al mismo tiempo, tenemos una herencia tristísima del kirchnerismo, que es que la mitad de los jóvenes no terminan la escuela. Ante ese marco, también cuesta el ingreso al trabajo en blanco porque la mayoría requiere terminalidad educativa. Hay un tema vinculado con la confianza y la autoestima que hay que atender y trabajar fuerte. En el primer año de gestión hicimos un estudio de campo para analizar debilidades y fortalezas en los jóvenes. El 90% respondía al instante la caracterización de sus debilidades, pero cuando preguntabas por fortalezas solo el 30% podía identificar algo positivo de ellos como un rasgo. Acá hay un tema que tiene que ver con la socialización y la identidad los jóvenes. Hablo de la valía y el sentido.

 

"Cuando creamos la Casa del Futuro lo primero que nos marcó Macri es que demos talleres de oficio, pero también demos programación, robótica, community manager. La preparación para los trabajos del futuro está muy presente en cada decisión de política pública que implementamos."

-¿Y cuál es la respuesta del Gobierno ante esa falta de contención?

 

-Estamos trabajando en políticas de inserción laboral integrales. Es clave empezar a trabajar la cuestión digital desde cero, como lo hacemos en los Centros de Primera Infancia. Todos los dispositivos territoriales que tenemos del Estado por parte del INJUVE siempre, por pedido de Mauricio Macri, tienen inclusión digital. Si proponés un taller de costura tenés que, al mismo tiempo, brindar conocimiento de habilidades digitales.

 

Además, en cada “Feria Futuro” (feria de empleo que gestionan varios ministerios) tenemos 10 mil jóvenes que van a buscar también la forma de buscar trabajo y la relación oferta y demanda. También, el Ministerio de Trabajo tiene programas de Empleo Joven como el “Curso de Introducción al Trabajo”, que es muy efectivo. Dura cuatro meses y se enseña cómo encarar entrevistas de trabajo, armado de currículum, además de que cuenta con un acompañamiento financiero. Otro programa es “Tu Primer Laburo”, que contiene cinco mil becas para estudiar inglés, asesoramiento para encarar entrevistas y diseñar tu currículum. Contiene una bolsa de trabajo, además.

 

-El Presidente y otros funcionarios del Gobierno hablan de la importancia de la preparación de la juventud para los trabajos y desafíos del futuro ¿Tienen los jóvenes las herramientas necesarias a su alcance para desarrollar esas capacidades?

 

-Se está trabajando en eso. Existe el “Plan 111 mil” que busca paliar la baja cantidad de programadores que tenemos en el país. Nace para cubrir esa falta y busca que cualquier persona mayor de 18 años pueda de manera gratuita aprender programación. Cuando creamos la Casa del Futuro lo primero que nos marcó Macri es que demos talleres de oficio, pero también demos programación, robótica, community manager. La preparación para los trabajos del futuro está muy presente en cada decisión de política pública que implementamos. No podemos gobernar para el siglo pasado, estamos pensando en lo que viene para no quedar desfasados del rápido cambio generacional.

 

 

 

-¿Qué lugar tiene la juventud en el gobierno de Cambiemos?

 

-Nunca hubo un Gobierno y un espacio político tan abierto a los jóvenes. Siempre se nos escucha, nos llaman y nos tienen en cuenta, incluso para el armado de listas. Sobre todo para la visión joven. Pudimos opinar sobre Progresar, cómo encarar la Feria Futuro. Los jóvenes definimos. Realmente, es un espacio en el que la juventud está muy presente.

 

-En el Gobierno anterior también había participación de la juventud…

 

-El kirchnerismo lo hizo de una manera más tradicional. Eso es lo bueno de ser un partido más nuevo. Desde muy temprana edad, los jóvenes ocupamos lugar de mucha responsabilidad y de liderazgo en el Gobierno. Siempre en PRO confiaron en nosotros. Siempre se confió en la transparencia, en las intenciones y en el trabajo territorial que hacemos.

 

-¿Y cuál es la diferencia entonces?

 

-Que es un camino un poco más largo. No sé cuánta injerencia tuvieron los jóvenes en las decisiones de política pública durante el mandato kirchnerista. De todas formas, creo que durante los últimos años a los jóvenes nos toca más de cerca la política. En especial los que crecimos con la experiencia del año 2001. Somos una generación que plantea que hay dos cosas que no se discuten: queremos vivir en democracia y queremos vivir en un país que cada vez sea más igualitario.

 

 

Nos preocupa que los jóvenes tengan una visión negativa o que crean que el Estado tenga que resolver absolutamente todos los problemas.

 

 

-¿Cuáles son las mayores dificultades de los jóvenes en la actualidad?

 

-La educación es una deuda pendiente en la discusión sobre hacia dónde vamos a avanzar, porque el mundo ya se la está dando. ¿Vamos a avanzar hacia la obligatoriedad de la terminalidad de la educación liberal o vamos a seguir trabajando sobre una educación más dual? Es lo que trabajan ahora Alejandro Finocchiaro en la Nación y Gabriel Sánchez Zinny en la provincia de Buenos Aires. Trabajar para que la educación sea más realista. Si vos querés empezar a lo técnico, ir a lo técnico. Si querés avanzar en la educación liberal universitaria, seguir hacia la educación liberal universitaria. También hay un tema con la relación con el Estado. En el Estado nos preocupa que los jóvenes tengan una visión negativa o que crean que el Estado tenga que resolver absolutamente todos los problemas.

 

 

 

-En los últimos días se conocieron encuestas que marcan una baja del apoyo del sector joven a Cambiemos. ¿Por qué cree que bajó el respaldo al Gobierno?

 

-Desde el Gobierno no vimos ningún número porque nos dedicamos a trabajar. Los jóvenes tienen una relación nueva con la política. Además, los involucrados en política somos la minoría del sector joven. No somos representativos de lo que piensan y siente los jóvenes en general.

 

"Estoy viendo gente que quizás la está costando más en la diaria pero que, pese a todo, nos sigue diciendo que no aflojemos."

-¿Qué lectura hace de la situación económica?

 

-Estamos atravesando un momento duro. Como dijo el Presidente, es una tormenta difícil producida por factores externos. Tenemos un equipo de Gobierno muy serio y capacitado con el corazón puesto donde más lo necesita la gente. Nuestros referentes tienen por completo en cuenta a quien peor la está pasando. Vamos a tener un país que gradualmente crezca y siga creciendo en los próximos 20 años, por nosotros, nuestros hijos y nietos. Para que realmente tengamos el país que entre todos vamos a construir.

 

-Usted es concejal en Almirante Brown y recorre la Tercera sección electoral, donde Cambiemos no cosecha buenos resultados electorales. ¿Qué situación percibe en los barrios ante la situación económica?

 

-Estoy viendo gente que quizás la está costando más en la diaria pero que, pese a todo, nos sigue diciendo que no aflojemos. Me emociona cuando veo gente con muchas necesidades que nos sigue pidiendo que no aflojemos porque creo que no tiene que ver con un gobierno en particular, sino con una deuda del argentino en general con la Argentina. Estamos trabajando por los que más lo necesitan. El no aflojar es que los dirigentes que hoy toman decisiones no aflojen porque del otro lado está la Argentina necesitada y que necesita del esfuerzo de todos para seguir adelante.

 

 

 

-¿Qué panorama ve para las elecciones del 2019? ¿Cree que Mauricio Macri va a reelegir?

 

-Sí, estoy convencida de que esta transformación que elegimos los argentinos va a continuar. Ahora también te puedo decir que realmente estamos enfocados en la gestión al 100%. Sería una desilusión para la gente e injusto que dedicáramos horas de nuestro tiempo en pensar en el 2019 cuando falta un año entero y tenemos tanto para hacer.
Si estamos pensando todo el tiempo en lo que va a pasar el 2019 estaríamos fallando en nuestro rol de servidores.

 

-¿Cuál es su postura en torno a la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo?

 

-Estoy a favor de la despenalización del aborto. Mi postura no representa a la Juventud PRO en su totalidad. Fuimos siempre muy respetuosos y dimos el debate. Dentro de la juventud hay diversidad de opiniones. Estamos trabajando muy fuerte el tema porque la juventud está pidiendo discutir el tema. En especial, los jóvenes de escuelas secundarias. Nos piden que también tengamos en cuenta su opinión.

 

 

 

 

-¿La Juventud PRO piensa movilizar al Senado el día de la votación en el Senado?

 

-Vamos a acompañar, como siempre. Somos Cambiemos y hay diversas posturas, pero vamos a acompañar la movilización de la sociedad con la campaña Mujeres y con todas las agrupaciones. Nos encontraremos en distintos lados de la Plaza pero vamos a acompañar cada uno desde su fuero íntimo en lo que cree.

 

-El debate generó tensiones puertas adentro del oficialismo. ¿Cree que Macri arriesgó de más habilitando la discusión?

 

-Para nada. Así es Mauricio. Macri es un tipo honesto y cree realmente que la discusión del aborto se tiene que dar. Sabe que él no es quien tiene que decidir. Tiene la visión de que la sociedad, aunque cruja y se mueva, así se hacen los grandes cambios. Los grandes cambios se dan trabajando de abajo hacia arriba y no al revés.

 

Martín Menem y Karina Milei.
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